Un estudio realizado por la Escuela de Arquitectura Mackintosh, en Escocia, ha revelado que muchos de las casas analizadas presentaban altos niveles de humedad. La tercera parte de esta humedad era causada por el secado de ropa lavada en tendederos interiores.
La humedad incrementaría la formación de esporas de moho y ácaros del polvo que suponen un riesgo para la salud.
"Necesitamos estar más conscientes del impacto de esta acción aparentemente inocua, y quienes construyen viviendas necesitan solucionar este problema", advirtieron los autores de la investigación.
Rosalie Menon, una de las investigadoras, afirma que la población no es consciente de cuánta humedad libera esta ropa en el aire: "Al visitar los hogares encontramos que estaban secando su ropa en la sala o en sus habitaciones".
"Algunas personas literalmente habían decorado la casa con ropa para secar. Pero con sólo una carga de lavadora se emitirán dos litros de agua".
Un total de 75% de las viviendas estudiadas, construidas en estilos variados, tenían altos niveles de humedad que pueden conducir al desarrollo de ácaros del polvo.
También se encontró una fuerte relación entre el secado de ropa y la formación de esporas de moho. Se descubrió que una espora en particular, que se sabe que causa infecciones pulmonares en personas con sistemas inmunes debilitados, estaba presente en 25% de los hogares analizados.
Una solución para este problema son las secadoras automáticas de ropa, pero el costo y el gasto de energía de estas máquinas es demasiado alto para muchas personas.
Los investigadores han reclamado que las nuevas viviendas se construyan con zonas especiales dedicadas al secado de ropa para evitar problemas de salud.
El proyecto analizó los hábitos de secado de ropa en una amplia zona demográfica de Escocia analizó de forma detallada la calidad del aire y el consumo de energía vinculados a los hábitos de secado de ropa.
Los científicos encontraron que en 87% de las viviendas se secaba la ropa lavada en el interior durante los meses más fríos.