Las imágenes de trabajadores aterrorizados frente a una pistola durante un atraco podrían tener los días contados. Las cámaras de seguridad solo son testigo de numerosos robos con violencia en bancos, tiendas, supermercados o joyerías. Pero ahora, gracias a investigadores de la Universidad de Sevilla, pueden servir de alarma.
Se trata de un novedoso sistema de seguridad que pondría las cosas mucho más difíciles a los delincuentes. Un programa que detecta "armas visibles del atacante lo antes posible", según detalla uno de los investigadores.
En las imágenes de una prueba realizada por alumnos se muestra el funcionamiento del programa: la cámara detecta la pistola, la marca en color verde y hace saltar las alarmas ante la presencia del arma localizada.
"Nosotros podríamos detectarlo en tiempo real y notificarlo a la policía sin necesidad de que el empleado o la empleada de turno se juegue la vida", añade el investigador. Con este detector habría menos riesgos para los empleados del establecimiento y la intervención policial sería más rápida y efectiva.
El último atraco violento se ha producido en una gasolinera de Fuente Álamo de Murcia, Región de Murcia. Un ladrón asaltó a las dos trabajadoras de las instalaciones con una pistola y golpeó sin piedad a una de ellas. La otra huyó rápidamente para intentar pedir auxilio pero no pudo, otro atracador la esperaba en la puerta armado con un cuchillo de grandes dimensiones. Los ladrones consiguieron llevarse el dinero de la caja.