La Universidad de Stanford ha publicado un estudio que ha llevado a cabo un equipo de científicos y médicos en el que se asegura gracias a un examen genético se puede descubrir si existe riesgo de padecer una fractura ósea u osteoporosis. La investigación, que es una de las más grandes que se han puesto en marcha, ha analizado a más de 400.000 personas.
En esta gran muestra, se identificó 899 regiones en el genoma humano asociadas con baja densidad mineral ósea, 613 de las cuales nunca antes se habían identificado hasta ahora. Las personas consideradas de alto riesgo (alrededor del 2 por ciento de los examinados) tenían 17 veces más probabilidades que otros de desarrollar osteoporosis y el doble de probabilidades de sufrir una fractura ósea en el transcurso de sus vidas.
Además, los investigadores afirman que "la identificación temprana de personas con un mayor riesgo genético de osteoporosis" podría ser una forma importante de prevenir o reducir la incidencia de fracturas óseas, que según la Fundación Nacional de Osteoporosis afecta a 2 millones de personas cada año.
Por otro lado, Stuart Kim, profesor de biología del desarrollo en dicho centro educativo, ha recomendado que para evitar padecer osteoporosis se debe ingerir alimentos ricos en vitamina D, calcio y hacer ejercicio con pesas y mancuernas.
El director del estudio comenzó su investigación para ayudar a los atletas de élite y a los miembros del ejército americano para saber si corren el riesgo de sufrir una lesión ósea importante durante los entrenamientos a los que son sometidos.
Sin embargo, una vez finalizado el estudio averiguó que existe una fuerte correlación entre las personas a las que se les predice que tienen el mayor riesgo de una baja densidad mineral ósea y el desarrollo de osteoporosis y fractura.
Aún así, dos estudios previos han demostrado que existe un componente genético para la osteoporosis ya que es más probable que se desarrolle si existe un historial familiar de la enfermedad. Además de la genética, también se incluye el ejercicio, la dieta, el peso y el sexo.