En febrero de esta año la NASA comenzó a trabajar en lo que más tarde se convertiría en una de las misiones espaciales más ambiciosas y emocionantes, llegar a Marte.
A bordo del cohete Space Launch System (SLS), y la nave Orion, la agencia espacial pretende viajar a Marte, dentro de otros propósitos, enmarcados en la misión espacial EM-1 (Exploration Mission-1).
Finalmente, y después de varios estudios e investigaciones, la NASA ha decidido que la SLS no albergará tripulación. El organismo afirma que es técnicamente es capaz de incluir personas en la EM-1, pero tras los análisis que han realizado los especialistas de la agencia espacial se ha decidido seguir desarrollando el proyecto del vuelo no tripulado.
Así lo ha afirmado en un comunicado donde sostiene que "después de sopesar los datos y evaluar todas las implicaciones, la agencia continuará ejecutando el plan original para el primer lanzamiento [...] sin tripulación", reza el comunicado de la NASA.
La fecha para el primer lanzamiento se mantiene aún en el aire. Los recientes datos indican que el despegue será imposible antes de 2020, mientas que Robert Lightfoot, el administrador temporal de la NASA, ha asegurado que existe la esperanza de que la misión comience en diciembre de 2019.