El monstruo del lago de Ness era una anguila gigante
Investigan durante un año el ADN encontrado en el fondo del lago
Un estudio realizado por científicos de la universidad neozelandesa de Otago ha aclarado un misterio que forma parte de este pueblo de Escocia desde hace siglos. El monstruo de la laguna de Ness era una anguila gigante, según el profesor Neil Gemmell al frente de la investigación que duró un año.
Los investigadores recopilaron abundante ADN encontrado en las más de 250 muestras de agua recogidas a diferentes profundidades a lo largo de un año en el lago que visitan millones de personas cada año por la curiosidad que despierta la leyenda de la extraña criatura.
El genetista profesor Neil Gemmell ha explicado en rueda de prensa que las anguilas abundan en el lago Ness, y su ADN estaba presente en todos los sitios de donde extrajimos las muestras.
"Los buzos aseguran que en el lago han visto anguilas tan gruesas como sus piernas, y al margen de que estén exagerando o no, que no lo sé, sí existe la posibilidad de que haya anguilas muy grandes en el lago", ha asegurado Gemmell. El tamaño que se le atribuye al monstruo del lago Ness es mucho mayor de un anguila promedio, como genetista a Gemmell, "no le parece imposible que algo pudiera crecer a un tamaño tan inusual".
El científico considera que será necesario seguir investigando para confirmar o refutar esta teoría, a partir de nuestros datos, la idea de las anguilas gigantes sigue siendo plausible, afirmó.
Gemmell descartó igualmente que el famoso monstruo pudiera ser algún tipo de esturión, tiburón o animal prehistórico.
No encontramos pruebas de la existencia de alguna de esas criaturas, por lo que lamento decir que no creo que la teoría del plesiosaurio pueda seguir manteniéndose, aclaró el investigador, en alusión al monstruo de cuello largo que ilustra los anuncios para atraer turistas a Ness.