A las tres de la madrugada del 24 de febrero, día de la invasión de Ucrania, Google Maps avisaba de "congestión de tráfico" en algunas carreteras rusas y bielorrusas que se dirigían hacia Ucrania. El movimiento de tropas rusas quedaba en evidencia a los ojos de todo el mundo (por cierto, Google Maps ya ha desactivado el servicio de tráfico en Ucrania).
Es un ejemplo de lo que se conoce como OSINT -siglas en inglés de Open Source Intelligence-, inteligencia o información de fuentes abiertas. La OSINT ha ganado una importancia creciente en los últimos años y ha experimentado una proliferación sin precedentes con la invasión de Ucrania.
"La proliferación del uso de Internet, cerca de 2.500 millones de usuarios a nivel mundial, y la facilidad de publicación de contenidos a través de diferentes medios como redes sociales o blogs ha favorecido que se almacene una desorbitada cantidad de información online", recuerda el INCIBE, organismo español de vigilancia cibernética, en su descripción de la OSINT.
Se trata, prosigue el INCIBE de "conocimiento recopilado a partir de fuentes de acceso público como medios de comunicación, información pública de fuentes gubernamentales, foros, redes sociales, blogs, wikis, conferencias, simposios, «papers», bibliotecas online, etc".
No sólo Estados Unidos ha difundido información que en otro tiempo se habría considerado top-secret, ya antes del ataque cualquier persona interesada podía seguir al minuto el movimiento de las unidades rusas por las imágenes que compartían los usuarios de redes sociales o las que difundían satélites civiles como los de Maxar. De aquí procede, por ejemplo, la información reciente sobre la larga columna militar rusa que avanza hacia Kiev.
La información recogida en bruto debe valorarse y analizarse. Desde tratar de confirmar su fuente original, geolocalización y veracidad hasta discernir su posible relevancia. Un proceso antes reservado a los servicios de espionaje y ahora abierto a profesionales y aficionados con distintos grados de conocimiento especializado y pericia digital. Ahora han encontrado una mina en la invasión de Ucrania, una guerra de conquista decimonónica en los tiempos de Tik Tok.
Veamos es un ejemplo publicado recientemente en un hilo de Twitter por la cuenta radicada en Francia @OSINT_Tactical.
Empiezan su análisis con una imagen captada de Telegram de un vídeo propagandístico en el que aparece un posible soldado checheno. Los chechenos de Ramzan Kadirov, aliados de Putin, han enviado tropas a Ucrania.
Al utilizar un programa de reconocimiento facial ruso, aparecen unos resultados interesantes, dicen los autores del hilo. El parecido indica que es una persona de alto valor y de interés. Que su cara aparezca en varias cuentas apunta a que es una persona conocida y con seguidores.
Al abrir una cuenta de la red social rusa VK en la que se ha detectado su cara, podemos asumir que esta persona es cercana al líder checheno Ramzan A. Kadirov.
La coincidencia facial queda confirmada con Microsoft Azure. El nivel de confirmación es bueno, pese a que la persona ha envejecido, apunta el autor del hilo.
Hay otro post en VK que le glorifica: "Nótese que ahora podemos estar seguros de que es una persona importante por sus condecoraciones", describe el tweet.
Otro software de pago ofrece resultados muy importantes. A partir de ese punto, ha sido posible encontrar miles de fotos y material online de este individuo. "Nótese la boina roja y su cercanía a Kadírov", señala @OSINT_Tactical.
Aquí podemos verle entrenando con la boina roja. Encontramos el logo de los spentnaz, las fuerzas especiales rusas, lo que confirma que es miembro de las tropas de élite rusas y entrena a soldados.
Hasta este punto, en ningún artículo ni foto aparece identificado con su nombre. En una de las imágenes se menciona una cuenta de Instagram @za_kra_mezhidov_87_95. Parece que la cuenta es suya. Tiene más de 293.000 seguidores.
Una foto encontrada en su Instagram aparece con un nombre. Aplicamos el sistema óptico de reconocimiento de caracteres.
Tenemos un nombre: Hussein Mezhidov.
La traducción del texto nos informa de su nombramiento como comandante del 249 batallón motorizado "Sur" de las fuerzas especiales del ejército ruso. Dirigió un centro de formación de las fuerzas especiales en Chechenia.
En este vídeo de Youtube, le vemos en Ucrania hace unos días hablando de cómo avanzan sus tropas.
Este es el enlace de Telegram al vídeo y su traducción.
"Kadírov, el líder checheno, ha subido este vídeo de sus guerreros. También se dirige a los ucranianos: Hoy en vuestro país no hay líderes que se preocupen por sus ciudadanos, piensen en ellos y traten de mejorar sus vidas.
Son solo como Bandera [Stephen Bandera, líder ucraniano nacionalista, antisoviético y colaborador de los nazis], nacionalistas y terroristas. Bandera, el Batallón Azov [unidad militar ucraniana de extrema derecha] y otros grupos terroristas afirman que os protegerán. No es verdad.
En primer lugar, el ejército ruso no ataca a civiles en Ucrania y, en segundo lugar, estos 'defensores' se convierten en los primeros maleantes y ladrones".