Los avances tecnológicos van en muchas direcciones, incluso las noticias de un informativo puede llegar a contárselas un presentador o presentadora virtual. El presidente de Venezuela acaba de estrenar una compañera, creada por ordenador, para su programa de televisión, se llama Sira y no es la única en el mundo.
La inteligencia artificial que acompaña a Maduro es debidamente aduladora. Necesita mejorar todavía en algunos aspectos, como el tratamiento de la risa que es poco natural, aunque la del humano de su lado tampoco parece mucho más creíble.
El diseño de presentadores toma a veces como modelo a periodistas reales, el chino Qiu Hao por ejemplo que al ver su réplica digital confiesa angustiarse con la posibilidad del relevo. La copia, como advierte ella misma, no necesita descansar.
Tampoco, de momento, cobran salarios ni cotizan a la Seguridad Social. Es un universo entero que hay que regular, pero, mientras, Sira, Nat y compañía se están incorporando ya a canales de noticias de todo el mundo.