Durante estas últimas semanas los suizos centran la mirada en los glaciares de sus Alpes: cuerpos sin vida, congelados y preservados de forma intacta, salen a la superficie del interior de los glaciares debido al calentamiento global.
Desde que se comenzara a hacer registros de la longitud y grosor de los glaciares suizos en 1880, es evidente que si se analiza los datos recogidos, se aprecia que la tendencia es el descenso paulatinamente del volumen debido al aumento de la temperatura terrestre que derrite el hielo.
Se estima que dentro de unos años la masa de glaciar se reducirá hasta llegar a un 36% mundial. Para que no llegar a esta situación sería necesario que la temperatura media fuera como la de hace 148 años. Según los registros de GLAMOS, una red de varias universidades suizas y el Ministerio de Medioambiente Suizo, durante el pasado año solo uno de los 80 glaciales que se encuentran en los Alpes no disminuyo su tamaño.
El deshielo ha hecho que transeúntes, trabajadores de estaciones de esquí, guías o montañeros hallen cadáveres descongelados que durante años se han mantenidos atrapados en el hielo, en algunos casos los cadáveres se remontan a los tiempos de la Segunda Guerra Mundial.
Este el caso de la pareja que hace un año era encontrada por un empleado de los teleféricos del Monte Cervino. La pareja de granjeros salió a pasear en 1942 y nunca más volvieron a tener señales de ellos. Su hija menor, estaba segura de que sus padres se encontraban atrapados en el hielo de algún glaciar. 75 años después, el progresivo descongelación del glaciar Tsanfleuron los expulso a la superficie, se encontraban 5 metros bajo el hielo cuando murieron. Los cuerpos vestían ropa de la Segunda Guerra Mundial y portaban consigo un reloj, una mochila y un libro.
El hallazgo ha supuesto una gran alegría para su familia, ya que ahora podrán enterrar los cuerpos, que se mantienen en buen estado, junto con sus enseres personales.
Ahora un guía en ese mismo monte, ha encontrado el cuerpo de un escalador japonés de 67 años. Hasta el momento se desconocen las causas de la muerte ni cuándo ni en qué circunstancias se produjeron, tampoco se sabe cómo despareció.
Estos hallazgos no son una novedad, son numerosos los cuerpos sin vida encontrados en las montañas. Otro muy sonado fue en 2012, dos excursionistas británicos que recorrían el glaciar del Aletsch, encontraron restos humanos, ropa, y equipamiento de tres montañeros desaparecidos en 1926, salieron a la superficie casi 90 años después.
Es muy común encontrar cuerpos de personas o equipos que salieron a la montaña a realizar rutas o escaldas en los años 70, y se espera que si la situación no cambia, el calentamiento global deje al descubierto más cuerpos.