El dragón de Komodo, en peligro de extinción debido al cambio climático

  • La UICN actualiza la Lista Roja de las especies en peligro de extinción

  • El atún consigue salir de la lista de especies en peligro de desaparecer

  • El 37% de las rayas y tiburones que existen entran en la lista

El dragón de Komodo va ser una de las víctimas de la subida del nivel del mar debido al calentamiento. El lagarto más grande del mundo solo habita en estado salvaje en cuatro islas de Indonesia y su nivel de amenaza ha aumentado, por lo que ha entrado en la categoría de especie en peligro de extinción por la reducción de su hábitat.

Según Craig Hilton-Taylor, Jefe de la unidad de la Lista Roja de la UICN, “debido a la subida del nivel del mar perderá el 30 por ciento de su entorno en los próximos 30 o 40 años y además fuera de la protección del parque nacional hay una inmensa pérdida de su hábitat”.

Esa lista roja que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) acaba de actualizar, también ha incluido entre las especies en peligro de extinción al 37% de las rayas y tiburones que existen debido a la degradación de los hábitats y la sobrepesca. Buena parte del casi medio millar de especies de tiburones que se conocen se encuentran en estado crítico.

“Las especies marinas tienden a ser ignoradas porque están bajo el agua y la gente no presta atención a lo que les sucede. Por eso, estamos tratando de incrementar los esfuerzos en protegerles”, comenta Craig Hilton-Taylor. Y esos esfuerzos funcionan. Ha sucedido con el atún rojo; hay cuatro especies de este pez que han mejorado muy notablemente su estado de conservación, aumentando sus poblaciones. Es uno de los pescados más comercializados para su consumo y sin embargo ha salido de la lista de especies en peligro de desaparecer gracias a un manejo más sostenible de las pesquerías.

“Lo del atún es una buena noticia, muestra que se puede hacer. Así que ahora tenemos que tomar ese ejemplo y tratar de aplicarlo con la pesca de tiburones”, expresa el jefe de la unidad de la Lista Roja de la UICN. Pero, en general, hay mucho que hacer. Según la lista elaborada por los expertos, el 28% de las especies de animales y plantas clasificadas en el mundo están amenazadas. Los científicos insisten en que hay que multiplicar los esfuerzos para garantizar su recuperación y no solo evitar que se extingan.