Los restos fósiles pertenecen a un diplodocido, apodado Dolly, que data del jurásico.
Científicos hallan las primeras evidencias de una infección respiratoria en dinosaurios, que les causaría síntomas parecidos a los de una gripe o neumonía
El estudio se ha hecho sobre los restos fósiles de un diplodocido, apodado Dolly, del jurásico, hace unos 150 millones de años.
Tras examinar tres vértebras, identificaron una protuberancias provocadas por sacos de aire nunca antes vistas
Hace 65 millones de años que se extinguieron y todavía siguen aportándonos datos reveladores para la ciencia. Hablamos de los dinosaurios. Los restos fósiles de un joven diplodocido hallados en Estados Unidos podría proporcionar las primeras evidencias de una infección respiratoria única en estos animales. Así lo desvela una investigación publicada en la revista Scientific Reports.
Se trata de un gran dinosaurio herbívoro de cuello largo, que fue encontrado en el suroeste de Montana y data del jurásico tardío, hace unos 150 millones de años. Los científicos lo apodaron Dolly. Cary Woodruff, paleontólogoa del Museo de Dinosaurios Great Plains de Malta, y otros compañeros de varios países examinaron tres vértebras cervicales de Dolly e identificaron unas protuberancias provocadas por sacos de aire nunca antes vistas en un dinosaurio y que probablemente se formaron debido a una infección respiratoria.
Sospechan que el dinosaurio sufrió tos, fiebre y otros síntomas gripales
Los científicos sospechan que el dinosaurio sufrió tos, fiebre, dificultad para respirar, pérdida de peso y otros síntomas propios de enfermedades respiratorias como la gripe o la neumonía. "Dados los síntomas probables que sufrió este animal, al sostener estos huesos infectados en tus manos, no puedes evitar sentir lástima por Dolly", declaró Woodruff a la revista. Y es que nadie lo pasa bien cuando está resfriado y tampoco ellos: "Se sintió tan mal como todos nosotros cuando estamos enfermos", añadió.
Según los estudios preliminares del equipo de paleontólogos y veterinarios, la infección respiratoria se propagó por las vértebras del cuello a través de los alvéolos, lo que provocó una deformación de estos huesos, según recoge EFE.
Los investigadores sospechan que se trató de una infección similar a la aspergilosis, una enfermedad provocada por hongos que suele afectar a las aves y a los reptiles, y especulan con que podría haber sido la causa de la temprana muerte de Dolly.