A pesar de las buenas intenciones, lavarlo cada vez que lo usemos no nos salva de los gérmenes que se adhieren a la superficie de la tabla de cortar.
Lo dice la doctora Lisa Ackerley, de la web especializada Hygiene Doctor, que en las cocinas sucias viven bacterias que provocan graves enfermedades como a salmonela, E-coli y campylobacter, las más comunes en Reino Unido.
Las tablas de cortar si no son lavadas adecuadamente pueden albergar estos gérmenes, sobre todo en las tablas que tienen mucho tiempo de uso y cuando no se guardan en el lugar correcto.
Por eso los especialistas recomiendan que para evitar enfermar a través del consumo de alimentos contaminados, es la sustitución frecuente de la tabla de cortar.
No hacerlo es poner en riesgo su salud y la de su familia, advierte la doctora Ackerley, experta en la higiene de los alimentos.
Entre los consejos de Ackerley es recordar no apoyar otros objetos que no sean alimentos, algo que ocurre frecuentemente en cocina. Limpiarlo a profundidad sobre todo cuando se corten alimentos que no van a ser cocinados, como panes, queso, etc.
Para limpiarlo mejor no usar el estropajo (que ya sabemo cuán sucio puede estar). Para quitar restos de verduras y otros, se recomienda el papel de cocina.
Tener en cuenta que para limpiar la tabla de cortar el agua no es suficiente. Hay que desinfectar, explica la doctora Ackerley, en el artículo que publica The Sun.
Para ello puede usar un detergente antibacterias o vinagre, aunque también servirá el lavavajillas cuando sean plásticas.
También se debe utilizar una tabla de cortar diferente para carne y para verduras. Lo mejor es identificarlas para evitar confundirse.
Sustituirlo frrecuentemete, sobre todo cuando sean evidente las incisiones y los arañazos que deja el cuchillo. Esto revela que ya es hora de cambiarla.
Las bacterias se meten en estas hendiduras aprovechando los restos de comida y humedad que se acumulan ahí.