La mayor preocupación tiene que ver con las noticias que se publican sobre filtraciones de datos. Un 77% de los españoles admite estar estresado también por la cantidad de contraseñas que tienen que administrar, hecho que potencia una entrada no deseada a tus cuentas, según un estudio realizado por Kaspersky Lab.
Estos datos se reflejan en la protección de sus dispositivos, y el 81% de la población asegura que sufre de estrés cuando se trata de protegerlos. El 74% reconoce que se siente abrumado por la cantidad de información sensible de la que disponen.
Debido al contexto actual, el 58% de los usuarios españoles espera encontrarse con un problema de ciberseguridad en los próximos doce meses. De hecho, el 54% de ellos admite haber sido víctima de un problema de este tipo en los últimos cinco años.
Horten Soler, psicopedagoga especializada en nuevas tecnologías, ha utilizado el término de 'ciberestrés', con "procesos de una exigencia continua que provocan estados de estrés" por la exigencia que exige el mundo digital actual y por las filtraciones de datos y problemas de ciberseguridad.
"Todo esto puede provocar una serie de consecuencias como son la irritabilidad, la ansiedad y la depresión (me siento exitoso en mis redes sociales o no), problemas de relación con los demás, alteraciones alimenticias (quiero gustar a los demás con mis fotos), comportamientos autodestructivos y hasta ataques cardiacos", señala Soler.
A quién confiar las contraseñas
Las redes sociales y el pago móvil suponen las tecnologías en las que menos confían los españoles (44% y 30%, respectivamente). Por su parte, el seguimiento por GPS y las aplicaciones de monitorización de salud y de música son las más fiables, con un 10% de los entrevistados afirmando que no les confiarían sus datos.
Como complemento a la seguridad, más de la mitad (56%) de los españoles confiarían a sus parejas los datos de acceso, mientras que apenas el 5% lo haría a un gestor de contraseñas.