Evita que tus dispositivos se calienten demasiado
No los expongas a las altas temperaturas dejándolos expuestos al sol o en bolsillos, guanteras del coche u otros lugares, no ventilados. El calor puede dañar rápidamente las baterías de los dispositivos electrónicos.
Reduce el brillo de la pantalla
El brillo al máximo consume varias horas de batería redundando en la autonomía de tu móvil o tableta. Lo puedes regular manualmente o utilizar una aplicación que lo hace de forma automática, según el lugar en que te encuentres.
No dejes abiertas aplicaciones que no vas a utilizar
Cierra las aplicaciones que no estes usando, porque chuparán batería sin que te des cuenta.
Quita la vibración y los sonidos del teclado
Si no es imprescindible, desactiva la vibración de notificaciones y los sonidos del teclado, así como los salvapantallas. Todos estos consumen batería.
Desconecta el Wifi y el bluetooth
Cuando no los necesites desactiva las antenas, que muchas veces se activan por defecto.
No abuses del GPS
Si tienes poca batería o necesitas guardarla porque olvidaste el cargador en casa no uses el GPS y recuerda que muchas aplicaciones lo activan para determinar tu ubicación, como Twitter, WhatsApp o google maps.
Evita que la batería se descargue completamente
No dejes que tu dispositivo se descargue completamente para volverlo a cargar. En los móviles y tabletas más modernas es contraproducente. Estos ciclos completos realizados frecuentemente provocan que la batería pierda su capacidad de mantenerse cargada por más tiempo.
Usa aplicaciones para monitorizar y obtener el mejor rendimiento de tu batería
Algunos dispositivos incorporan herramientas para el mantenimiento de sus baterías (Sony, Lenovo). Estas evitan que se carguen demasiado o lo desconectan cuando están enchufados tras una carga completa. Existen aplicaciones que puedes instalar para conseguir los mismos resultados.