Los trucos para saber si te están intentando estafar por WhatsApp

Una de las frases habituales en las películas policíacas es aquella de “el crimen nunca descansa” y eso es precisamente lo que hay que tener muy presente cuando hablamos de las estafas que se llevan a cabo utilizando la aplicación de mensajería más utilizada de España –y del mundo–, que no es otra que WhatsApp. 

¿Hay intentos de estafar por WhatsApp?

La respuesta a esta pregunta es un rotundo sí. Y no es de extrañar si tenemos presente que en nuestro país en 2023 había ya unos 36 millones de usuarios aproximadamente. Con una cifra tan elevada, los delincuentes tienen mucho más sencillo perpetrar sus estafas, generalmente mediante ingeniería social. A fin de cuentas, si solo caen en la trampa un 1 % o un 2 % de los usuarios, el botín ya va a ser considerable.

¿Cuáles son las estafas por WhatsApp más frecuentes?

La mayoría de las estafas que se realizan utilizando este servicio de mensajería propiedad de Meta (dueña también de Facebook e Instagram) tienen un mismo modus operandi y ese es la ya apuntada ingeniería social. El eslabón más débil de la cadena de la ciberseguridad no es la tecnología, sino los propios usuarios, pues en numerosas ocasiones son los que “abren la puerta” a todo tipo de malware. Así pues, la estafas por WhatsApp más frecuentes son las siguientes: 

  • Solicitud del código que llega por SMS. Se trata de una estafa común donde los delincuentes intentan obtener acceso a la cuenta de WhatsApp. En primer lugar, se recibe un SMS con un código de verificación de WhatsApp. Este código es legítimo y es el que la aplicación envía cuando alguien intenta registrar tu número en un dispositivo nuevo. A continuación, se recibe un mensaje de alguien (puede ser un contacto conocido cuya cuenta ha sido hackeada o un número desconocido) que afirma haber recibido por error el código de verificación del usuario y aprovecha para pedir que se lo envíe. En caso de caer en la trampa, el estafador podrá registrar la cuenta de WhatsApp en su dispositivo, lo que le dará acceso a todos los chats y contactos, con lo que ello supone para la privacidad del usuario.
  • Alguien conocido pide dinero por encontrarse en apuros. El delincuente se hace pasar por un familiar o un amigo –no es de extrañar recibir un mensaje de “tu madre” pidiendo ayuda–. Argumentará que ha perdido su teléfono y que por eso está escribiendo desde otro número y, claro está, que se encuentra en un apuro para el que necesita que se le envíe dinero, ya sea mediante una transferencia, un bizum o cualquier otra opción que se les ocurra.
  • Saludo de un desconocido. Otra posibilidad es recibir un mensaje de alguien desconocido que poco a poco se gana la confianza del usuario hasta sonsacarle datos relevantes.
  • Mensaje falso de la Administración Pública y de otras entidades como los bancos. Quien más y quien menos ha recibido en su WhatsApp algún mensaje de un número desconocido que parece ser de alguna de las administraciones públicas –hacienda, SEPE, etc.– o del propio banco. En él se expone la necesidad de resolver alguna cuestión a través de internet. Y claro está, el enlace que se incluye en el mensaje lleva a una web fraudulenta, abriendo numerosas posibilidades de hacking y fraude para los ciberdelincuentes.

Además de los anteriores podemos apuntar otras estafas como el timo del falso sorteo, de una oferta de trabajo que no existe e incluso del pronto pago de una multa. Es decir, los peligros que nos acechan son numerosos y por eso hay que tener presentes los trucos para saber si nos están intentado estafar.

Trucos y consejos frente a las estafas por WhatsApp

  • Verificar el número. Si se reciben mensajes de números desconocidos, especialmente internacionales, siempre hay que tener cuidado. Además, es conveniente revisar el perfil del remitente. Los que no tienen fotos o son genéricas resultan sospechosos.
  • Ortografía y gramática. Muchos mensajes de estafa contienen errores gramaticales y ortográficos.
  • Urgencia. Los mensajes que crean un sentido de urgencia han de levantar sospechas.
  • Ofertas poco creíbles. Lo mismo ocurre con esas ofertas que son demasiado buenas para ser verdad.
  • Datos sensibles. Obviamente, otra de las señales que deben invitar a desconfiar es la solicitud de información personal como contraseñas, números de tarjetas de crédito, documentos de identidad, etc.
  • Enlaces externos. De igual modo, nunca hay que hacer clic en enlaces enviados por números desconocidos. Claramente puede tratarse de phishing.

Aparte de poner atención en los puntos aquí señalados, el usuario debe configurar la privacidad de WhatsApp para que solo sus contactos puedan ver su foto de perfil, su estado y su última conexión. Además, conviene bloquear y reportar los mensajes sospechosos que se reciben. Y por supuesto, mantener informado a amigos y familiares sobre las posibles estafas a las que se ha estado expuesto. Finalmente, no hay que pasar por alto las actualizaciones de la aplicación pues suelen incluir mejoras en la seguridad.