La mano biónica que le cambió la vida a una mujer: la prótesis está conectada a los huesos, músculos y nervios
Los cirujanos pudieron fijar la prótesis al esqueleto de la mujer gracias a la osteointegración, posibilitando la conexión eléctrica con el sistema nervioso a través de electrodos implantados en nervios y músculos
La mano biónica implantada está altamente integrada a nivel neuromusculoesquelético y permite a la paciente realizar actividades de precisión
Crean implantes cerebrales que conectan cerebro y ordenador para devolver el habla perdida
Karin, una mujer sueca, perdió gran parte del brazo derecho en un accidente agrícola. Sufría dolores insoportables en el miembro amputado, pero un equipo multidisciplar le implantó una mano biónica, conectada a través de sus músculos y huesos con el sistema neurológico. Esta prótesis, todo un reto científico, le cambió la vida.
La fijación mecánica y el control fiable de las prótesis implantadas directamente a los nervios y al sistema óseo son dos de los mayores retos de la sustitución artificial de miembros pero esta mano biónica, diseñada por el equipo de Catalán superó todas las expectativas y dificultades.
MÁS
Un tetrapléjico consigue caminar con el pensamiento mediante un ‘puente digital’ entre el cerebro y la médula
El primer exoesqueleto pediátrico del mundo cumple 10 años: Darío y Tiago se ponen de pie por primera vez
Joseph Dituri, el rey Tritón que vive bajo el fondo de un lago en Florida para demostrar cómo mejora su salud
Los cirujanos pudieron fijar cómodamente la prótesis al esqueleto de la mujer gracias a la osteointegración, posibilitando la conexión eléctrica con el sistema nervioso a través de electrodos implantados en nervios y músculos.
El implante fue desarrollado por un equipo de ingenieros y cirujanos dirigido por Max Ortiz Catalan, jefe de investigación en prótesis neurales del Instituto de Biónica de Australia y fundador del Centro de Investigación en Biónica y Dolor (CBPR) de Suecia. Los resultados de la investigación se publicaron este miércoles en un artículo en la revista Science Robotics.
Karin, ha contado que antes del implante biónico, "sentía como si tuviera constantemente la mano en una picadora de carne, lo que me creaba un alto nivel de estrés y tenía que tomar altas dosis de analgésicos".
Pero, tras el implante, la prótesis biónica no solo le resultó cómoda y funcional sino que, además, alivió el dolor. "Me dio una vida mejor", dice. Un vídeo demuestra cómo: la mujer puede hacer tareas de tanta precisión como usar un destornillador o sujetar tazas y objetos frágiles.
Una mano biónica altamente integrada a nivel neuromusculoesquelético
"Karin es la primera persona con amputación por debajo del codo que recibió este nuevo concepto de mano biónica altamente integrada que puede utilizarse de forma independiente y fiable en la vida diaria.
La capacidad para usarla con comodidad y eficacia en sus actividades diarias durante años es una prueba esperanzadora de las potenciales capacidades de esta novedosa tecnología que cambiará la vida de las personas que se enfrentan a la pérdida de una extremidad", según ha explicado el cirujano, jefe de esta intervención, Max Ortiz Catalán.
La dificultad principal con este grado de amputación es alinear e introducir dos huesos (radio y cúbito) en un espacio pequeño para implantar la prótesis. "El nivel de amputación por debajo del codo presenta retos particulares, y el nivel de funcionalidad alcanzado marca un hito importante para el campo de las reconstrucciones avanzadas de extremidades en su conjunto", apunta Rickard Brånemark, investigador del MIT y profesor de la Universidad de Gotemburgo. El equipo de investigación logró desarrollar un implante neuromusculoesquelético que permitía conectar el sistema de control nervioso del paciente con el sistema de control electrónico de la prótesis.
"Nuestro enfoque quirúrgico y de ingeniería integrado también explica la reducción del dolor, ya que Karin utiliza ahora, en cierto modo, los mismos recursos neuronales para controlar la prótesis que utilizaba para la mano biológica que le faltaba", comenta el investigador.
La prótesis no solo fue funcional sino que, tal y como explica la paciente, le permitió tener "un mejor control sobre mi prótesis" y sentir menos dolor. "Hoy necesito mucha menos medicación", resumen Karin.
La nueva tecnología biónica para implantes osteointegrados
Una característica clave de la nueva tecnología biónica es la fijación esquelética de la prótesis mediante osteointegración, el proceso que conecta al tejido óseo con el titanio creando una fuerte conexión mecánica.
Al combinar la osteointegración con la cirugía reconstructiva, los electrodos implantados y la IA, los médicos lograron restaurar la función humana de una forma sin precedentes.
La mano robótica desarrollada por Prensilia, denominada Mia Hand, presentaba componentes motores y sensoriales únicos que permitían al usuario realizar el 80% de las actividades de la vida diaria.