El comunicado emitido por La Agencia Nacional de Frecuencias (ANFR) francesa advirtiendo sobre las altas ondas emitidas por el modelo iPhone 12 y pidiendo la retirada de los móviles del mercado, ha alertado a otros organismos como la OCU en España que también ha pedido que se sigan los pasos del país galo hasta que se aclare lo sucedido.

Las emisiones DAS para un teléfono situado en un bolsillo o en la mano deben ser como máximo de 4W/kg, según la normativa europea, y el análisis de teléfonos iPhone 12 arrojó un valor medio de 5,74, añadió la ANFR.

A partir de los resultados obtenidos por la Agencia Nacional de Frecuencia de Francia, OCU aclara que los límites solo se superan en las mediciones de las extremidades (fijados en 4 W/kg, los más generosos), ni en la cabeza ni en el tronco (donde no pueden superar los 2 W/kg). 

Son, además, mediciones realizadas en la peor situación posible, tal y como exige la normativa: con el móvil emitiendo a máxima potencia, en la red más desfavorable y en la posición en la que la antena del móvil más incide sobre el cuerpo. Es más, los límites de seguridad la Unión Europea son 50 veces inferiores a los necesarios para que se produzca un aumento de 1 ºC en la temperatura de la cabeza. 

Desde la OCU aseguran que, si alguien posee uno de los móviles que se piden retirar, “no hay motivos para una alarma exagerada” ya que los límites establecidos por la Unión Europea “son muy rigurosos, 50 veces menores de las cantidades que podrían considerarse sospechosas”, aun así, hay gran disparidad de opiniones sobre las emisiones de radiaciones en el cuerpo humano. 

La exposición a una alta emisión de radiaciones en el cuerpo podría causar quemaduras en la piel o cataratas por exposición prolongada a radiaciones ópticas, efectos térmicos por absorción de energía de las microondas y radiofrecuencias, entre otros problemas para la salud humana.

Para evitar que el cuerpo absorba las mayores radiaciones posibles aconsejan utilizar auriculares cuando se hable por teléfono, evitar hablar cuando nos encontremos en lugares con mala cobertura. Además, advierten que los niños son los más sensibles a las radiaciones, por lo que recomiendan utilizar el móvil lo menos posible. 

Apple ha negado que iPhone 12 incumpla la normativa de radiación, como recoge Apple Insider. La firma tecnológica ha afirmado que facilitó al organismo francés los documentos que muestran que cumple con los niveles de emisión de ondas de radiofrecuencia en todo el mundo.

En las pruebas internas de Apple sobre los teléfonos iPhone 12 Pro, la compañía comparte de forma pública en su web que los cinco modelos analizados están por debajo de los límites establecidos de absorción para el cuerpo y las extremidades.