Calendario astronómico febrero 2023: qué planetas se verán y cuándo es la Luna de Nieve
Febrero es un buen mes para la observación del cielo, puesto que las noches siguen durando más que los días
En febrero de 2023 podremos ver al menos cuatro planetas y una espectacular Luna de Nieve
Cometa ZTF: las imágenes más espectaculares que deja hasta el momento
Febrero es uno de los meses más fríos del año, pero también es uno de los meses con las noches más largas. Esto nos ofrece una oportunidad de oro para observar varios planetas que se asoman al anochecer o el amanecer, así como la espectacular Luna de Nieve que se ilumina a comienzos del mes. Estas son las fechas más importantes del calendario astronómico.
Los días se van a ir alargando de forma notable durante el mes de febrero. El mes empezará con algo más de 10 horas de luz solar en la mayor parte de España y, para cuando termine, durarán ya más de 11 horas. Las largas noches del último mes completo del invierno nos brindarán este año la oportunidad de ver al menos cuatro planetas, así como un cometa muy especial.
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Un cometa verde se deja ver en la Tierra a simple vista
El cometa C/2022 E3 ZTF ha sorprendido a todos al dejarse ver más nítido de lo esperado a simple vista desde muchas partes del mundo. En las imágenes tomadas sobrevolando diferentes lugares del planeta se puede apreciar la espectacular coma del cometa con un tono verdoso.
El 12 de enero, C/2022 E3 pasó por el punto de su órbita más cercana al Sol (perihelio) y el 1 de febrero a alcanzado su mayor aproximación a la Tierra, situándose a 42 millones de kilómetros de distancia. Puede parecer una distancia inmensa, pero su excepcional brillo, que ha ido en aumento a comienzos de 2023, lo ha hecho visible sin necesidad de prismáticos o telescopio.
El cometa C/2022 E3 (ZTF) fue descubierto en marzo del año pasado. La última vez que este cometa sobrevoló la Tierra fue hace unos 50.000 años, durante el Paleolítico.
Mercurio será visible al amanecer la primera quincena de febrero
A principios de este mes, los más madrugadores pueden intentar atisbar Mercurio sobre el horizonte sudeste, justo antes de la salida del Sol.
El planeta más interno y pequeño del sistema solar se sitúa a una elevación bastante limitada antes de verse engullido por el brillo del crepúsculo, por lo que solo podremos localizarlo si tenemos una línea de mirada despejada hacia el sudeste, sin edificios, montañas u otros obstáculos visuales, informan desde el Real Observatorio Astronómico de Madrid, parte del Instituto Geográfico Nacional (IGN).
Los mejores días para intentar verlo son los primeros del mes, ya que Mercurio cada vez se presenta a menos altura en el momento de despuntar el alba.
Luna de Nieve el 5 de febrero
El mes comienza con la Luna creciente gibosa, aumentando su fracción iluminada hasta alcanzar la fase de Luna llena el día 5. La Luna de Nieve alcanzará su máximo a las 19:28 horas de ese día, y se conoce con este nombre -atribuido por los primeros pobladores de Norteamérica- porque es la época del año en que tradicionalmente más nieve se acumula en el continente.
Otro nombre muy popular para el plenilunio es Luna del Hambre, puesto que en este periodo del año el alimento solía escasear. No es buena época para la caza, y los cultivos prosperan en menor cantidad por el frío.
A mediados de mes la veremos ya de madrugada, en fase menguante, mientras que durante la última parte del mes la Luna reaparecerá al anochecer como creciente.
Conjunción de la Luna con Venus y Júpiter entre los días 21 y 23
Los atardeceres se han despedido de Saturno, que pasa durante este mes de febrero por detrás del Sol y que solo puede verse con mucha dificultad hacia el oeste los primeros días del mes, rozando casi el horizonte durante el crepúsculo.
Mucho más visible sigue siendo Júpiter, que destaca como un punto brillante a una considerable altura sobre el horizonte oeste, aunque a menor elevación según va avanzando el mes. Hacia mediados mes, ha perdido altura respecto al horizonte y acerca a Venus, que con el avance del mes, por el contrario, va ganando altura.
Venus se muestra muy brillante, y resulta más fácil de ver hacia finales de mes dada su creciente elevación. El día 22 de febrero, una fina Luna creciente se situará precisamente entre Venus y Júpiter, informan desde el IGN.
Conjunción de la Luna con Marte
Si alzamos aún más la mirada tras ponerse el Sol, podremos ver a Marte situado en un extremo del hexágono del invierno, en la constelación de Tauro. El planeta rojo es visible durante gran parte de la noche, ya que no desaparece por el horizonte noroeste hasta pocas horas antes del amanecer.
Los días 27 y 28, la Luna, que acaba de alcanzar su fase de cuarto creciente, se situará a un lado y a otro de Marte, lo cual puede servirnos de guía para localizarlo. Ese mismo día 28 se produce la mínima separación entre Júpiter y Venus durante el mes de febrero, por lo que, si miramos hacia el horizonte oeste, veremos los dos planetas más brillantes del cielo bastante próximos entre sí.