La comitiva llega al juzgado. Un Alfa Romeo va delante del furgón de la Guardia Civil que traslada a José enrique Abuín desde prisión. El coche es similar al utilizado por el Chicle el día que asesinó a Diana Quer. El tumulto no nos deja ver la entrada de Abuín. Entran y salen del juzgado bidones de gasolina, maniquís, y por fin se lo llevan a la reconstrucción. Todo preparado para reproducir fielmente su declaración ante el juez. La última, la del 4 de mayo. La que ajustó a los resultados de la autopsia cuando ya pudo estudiar el sumario.
El Alfa Romeo llega el primero a A Pobra donde todo está preparado. En este punto de A Pobra, Abuín dijo que robaba gasolina de las caravanas de feria. Le vemos agachado simulando el robo con una manguera en una furgoneta que hace de caravana de feriante. Se cruzó con Diana a las 2.40. Según su versión discutieron porque le sorprende, y la mata involuntariamente dice: "Le eché la mano al cuello, la mano derecha, le di dos o tres golpes en la cara y vi que no se movía". La reconstrucción de la muerte de Diana no la vemos porque tapan la escena con una mampara. Pero sí le vemos corriendo cuando lleva en brazos el maniquí que han utilizado. Cuando sacan el maniquí descubrimos que llevan dos, y uno blanco lleva un pantalón rosa, la misma ropa que llevaba Diana, aunque suponemos que no lo utilizan por delicadeza, porque la madre y la hermana de Diana han acudido al lugar para verlo. Cuando traslada el cuerpo/maniquí al vehículo aparcado, Abuín le cuenta al juez cómo la introduce muerta, reitera. Muy atento está el agente de la UCO que le interrogó y al que contó otras versiones. La oficial que la había atropellado sin querer y se asustó, la extraoficial que le puso una brida en el cuello para sujetarla al asiento del copiloto porque no paraba de chillar. El Chicle cambió sus versiones porque no se ajustaban a los resultados de la autopsia. El abogado que tuvo al principio le había aconsejado que la versión del atropello era beneficiosa para él, y le convenció para que dijera donde estaba el cuerpo. Así encontraron a Diana en la nave de Asados.
Allí se dirige la comitiva saliendo de A Pobra por la gasolinera donde la cámara captó su Alfa Romeo. Lo vemos pasar y coger la autovía camino de la nave. Pasan por el puente de Taragoña donde el Chicle, a través de la ventanilla, tiró el teléfono de Diana a la ría. Eran las 2.58. Hoy le han pedido que escenificara dónde se guardó el móvil antes de arrojarlo, y cómo se calló al suelo en el forcejeo con Diana. El teléfono estaba golpeado.
La comitiva llega a Asados, a la nave. Según su versión, hundió el cuerpo con piedras; estaba sin ropa. Y encontraron unas bridas flotando que según la autopsia podrían haber servido para maniatarla y estrangularla. Pero eso Abuín lo niega: "Yo a Diana no la toqué. No hablé con ella. La ropa se la quité en el pozo. Ya estaba muerta". La reconstrucción aclarará sus contradicciones y develará sus mentiras.
Los investigadores lo han grabado todo, les hemos visto correr detrás de él cuando representaba cada situación. Lo hacen con la intención de hacer un video de los hechos que servirá para instruir al jurado popular. También medirán tiempos, posiciones y traslados, pero eso volverán a repetirlo los agentes de la UCO en horario nocturno, en las mismas circunstancias. Abuín se ha quitado la capucha de la sudadera en la puerta de la nave de Asados, cuando creía que no le estaban grabando de cerca. El gesto ha durado unos segundos pero suficiente para verlo bien y comprobar, como ya intuíamos al verlo de lejos, que ya no lleva el pelo tintado de rubio, como lo tenía cuando raptó a Diana y la asesinó, y como lo tenía cuando intentó raptar a la joven e Boiro y le detuvieron.
Cuando han terminado la reconstrucción el Chicle ha vuelto a “jugar” con los investigadores. Les ha llevado a un paraje de padrón donde dice que se deshizo de la ropa de Diana. No han encontrado nada. Se lo han llevado de vuelta a prisión igual de frío, sereno y "colaborador"; enrocado en sus mentiras estudiadas.