'El Chicle' puede ser condenado a la pena máxima, aunque no se pruebe la agresión sexual
Los huesos son tejidos duros que no se deterioran aunque estén sumergidos en agua dulce durante muchos tiempo, como ha ocurrido con el cuerpo de Diana Quer. Por eso, los forenses pueden obtener el 100% de la información, como si se tratara de huesos de alguien que ha fallecido poco antes de hacer el estudio antropológico. Ese es el motivo por el que el informe preliminar descarta el atropello, porque no se han encontrado lesiones traumáticas graves que así lo indiquen.
Por ello, considera también que Diana murió por estrangulación. La clave: hay fractura del hioides, un pequeño hueso con forma de 'U' o herradura que sujeta la garganta, e inequívoca prueba de que la persona ha muerto estrangulada.
Con el informe preliminar, el juez tiene evidencias que acusan al autor confeso, José Enrique Abuín, de la muerte de Diana. Pero son necesarias más pruebas específicas para determinar, por ejemplo, cómo se produjo la muerte o si el Chicle cometió agresión sexual. Un resultado que podría suponer para él la pena de prisión permanente revisable.
Pero los especialistas reconocen lo difícil de la determinación, dada la conservación de los restos, sumergidos en agua, y que han modificado su estructura, debido a reacciones químico orgánicas. No es fácil, es bastante improbable, a no ser que existan lesiones en tejidos, en los músculos o hallando ADN del agresor.
Los expertos en Medicina legal buscan también datos sobre el uso de tóxicos, sustancias utilizadas para adormecer a Diana, pelos donde extraer ADN y conocer a quién pertenecen. Trabajan para afinar el diagnóstico de cómo y cuándo murió Diana Quer. No se podrá dar día y hora, pero ya se sabe que ocurrió en agosto de 2017.
No hay prisa judicial, afirman los expertos. Cuando encajen las piezas del puzle que es un estudio forense, el informe final será preciso y contundente.