La discoteca Chic de Roses (Girona) ha pasado en cuestión de horas de celebrar la reapertura del local, tras diez años con las persianas bajadas, a verse en la obligación de cerrar de nuevo.
La sala realizó una fiesta de reapertura el pasado jueves con la actuación sorpresa de Nebulossa, el grupo musical que representará a España en Eurovisión. Una alegría por la reapertura que se esfumó al día siguiente, cuando los Mossos d'Esquadra precintaron el local, después de que la Policía Local detectase deficiencias en una inspección.
"No funcionaba la manguera de agua en caso de un posible incendio ni el generador eléctrico de emergencia", explicó la concejala de Roses, Olga Simarro, en declaraciones a Vila de Roses sobre las deficiencias detectadas en el local.
Este calvario volvía a revivir una situación sufrida en 2013, cuando la discoteca cerró por falta de seguridad. Sin embargo, el establecimiento ha salido al paso y afirman haber sufrido un sabotaje, según han explicado a Empordà TV.
"Algunos problemas técnicos nos obligan a posponer la apertura al público en general durante una semana para garantizar el perfecto funcionamiento de todas nuestras instalaciones", explicaron en sus redes sociales. Ante esta situación, la discoteca decidió devolver el dinero a aquellos que habían comprado entradas o reservado mesas para el pasado sábado por la noche.
Ahora, el local volverá a abrir el próximo 20 de abril y espera poder dejar atrás los problemas de seguridad para poder disfrutar de la segunda vida de la discoteca, que fue inaugurada en 1980 y aportó "una nueva dimensión" a las noches de la Costa Brava.
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