El expresidente de la Generalitat y eurodiputado de Junts, Carles Puigdemont, ha asegurado este jueves que dejará "el exilio definitivamente" para asistir personalmente al pleno del Parlament si es candidato a la investidura tras las elecciones catalanas del 12M.
Carles Puigdemont ha prometido este jueves que volverá a Cataluña, aun a riesgo de ser detenido, el día que el Parlament celebre el debate de investidura posterior a las elecciones del 12 de mayo, si dispone de una mayoría para ser investido presidente de la Generalitat.
Así lo ha anunciado en su conferencia en una abarrotada sala anexa del Ayuntamiento de Elna (Francia), arropado por la plana mayor de JxCat y por su esposa, Marcela Topor, y ante cerca de 1.400 asistentes, según la organización. "Hoy comienza la cuenta atrás de mi retorno", ha proclamado Puigdemont, que espera que para el debate de investidura posterior al 12M -que está previsto que tenga lugar a finales de junio- ya pueda beneficiarse de la ley de amnistía para volver con garantías.
"Se supone que los jueces habrán aplicado las disposiciones previstas en la Ley de Amnistía, pero ya sabemos que, si a un juez español le das un limón, te hace una crema catalana", ha ironizado en la conferencia que ha pronunciado en el Ayuntamiento de Elna (Francia).
"Si adoptan una actitud de rebeldía e insumisión y se niegan a cumplir la ley, asistiré igualmente al pleno si tengo la mayoría para ser investido", ha añadido.
Para hacerlo posible, ha apelado a la movilización en las urnas con el fin de lograr "una mayoría política y social que, como en las mejores ocasiones de la Historia, sea capaz de dar la vuelta a las previsiones y sorprender a los ilusos enterradores".
Tras haber "aguantado seis años y medio en el exilio", ha dicho, su retorno no podía hacerse "a escondidas", ni convertirse en una "gamberrada provocativa haciendo un selfi" en algún punto de la frontera, ni tampoco podía ser fruto de "una rendición", ni podía producirse con fines "oportunistas", ni como un "acto de servicio a un partido para obtener réditos electorales".
Suponiendo que la justicia española no le garantice la amnistía en el momento en que se celebre el debate de investidura, Puigdemont se ha comprometido a "asistir igualmente al pleno del Parlament" si tiene "la mayoría para ser investido". "Voy a por todas", ha recalcado Puigdemont, que ha advertido a los suyos de que "hará falta mucha movilización", empezando en las urnas el próximo 12 de mayo, una cita para la que ha pedido "concentrar las fuerzas" en su candidatura para "dar la vuelta a las previsiones y sorprender a los ilusos enterradores de Cataluña".
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