El doblete de una pastelería de Barcelona, con el mejor panettone clásico y de chocolate de España: "Nunca se ha hecho"

Una pastelería en el corazón del Montseny (Barcelona) se acaba de coronar con el mejor panettone de España. Se trata del obrador Vallflorida Xocolaters, un negocio familiar que ha celebrado su 40 aniversario con una distinción por partida doble, con el mejor dulce clásico y el de chocolate,

"Este doblete nunca se ha hecho. Es como Messi con sus ocho balones de oro. Es algo increíble. Estamos en un momento de bajar las pulsaciones, tocar los pies en el suelo y disfrutar lo que hemos ganado", explica a Informativos Telecinco el pastelero Lluís Costa, al frente del establecimiento en Santa Maria de Palautordera.

Un reconocimiento a sus panettones, que están a un precio medio de 25 euros el medio kilo y 45 euros el kilo. "El secreto más importante es la pasión por el trabajo. Cada uno tiene su familia, pero para conseguir un reto es importante luchar y buscar el sueño sin cansarse".

Este deseo de lograr la excelencia ha sido premiado por partida doble, aunque el maestro pastelero catalán reconoce el fracaso previo a entregar sus galardonados dulces tradicionales de Navidad.

"No salió el resultado que esperábamos la semana anterior a la entrega. Hicimos hasta tres pruebas que no nos gustaron. Pero la última salió increíble", recuerda Lluis sobre una angustia que no acabó con su sueño.

Ahora, la pastelería fundada en 1983 rebosa de felicidad. "Buscamos una ternura absoluta, un producto ligero, bueno y sano. Que sea algo que podamos comer y disfrutar. Una fruta poco confitada, nada amarga y con un aroma diferencial".

Un premio que pone en valor la técnica, la materia prima y el proceso. "Lo que hemos hecho es rodearnos de los mejores. Seguimos aprendiendo para mejorar. Hemos ganado, pero no quiere decir que las otras sean peor. Es un galardón colectivo en el sector, que tiene que reivindicar el producto de buena calidad de la pastelería artesana".

Esta gratitud ya la vivió en años anteriores al coronarse con otros premios, como el del mejor croissant artesano de mantequilla en 2015. "Nos puso en el mapa. En 2018 también ganamos al de mejor pasta de té, que nos ratificó en un público objetivo de negocio".

Pero la gloria ha llegado en 2023. "Es el premio de la excelencia. La copa sería la pasta de té, la liga el croissant y la Champions es uno de los panettones y el otro la copa del mundo. Hemos conseguido todo ahora mismo".

El panettone no es nuestro producto estrella

Precisamente, su producto estrella poco tiene que ver con su último reconocimiento. "Trabajamos mucho el chocolate en tejas y turrones. El panettone no es nuestro producto estrella, pero llevamos dos años siendo un referente nacional. Vendemos en Galicia, Asturias, País Vasco o Valencia".

Lluis creció entre harina, chocolate y cremas desde pequeño. Con 16 años empezó a trabajar en el negocio familiar, mientras se formaba en la Escuela de Pastelería del Gremio de Barcelona, donde tuvo la oportunidad de aprender de grandes referentes del mundo de la pastelería.

"Tenemos la suerte de poder continuar el negocio familiar, mi hermano y yo. Al final es gracias al esfuerzo e implicación de toda la familia. Hemos culminado los mejores concursos que hay. Ahora toca disfrutar y vienen dos años de relax e intentar transmitir a todo el mundo qué hacemos. Nos ayudará a abrir puerta en otros continentes y formar profesionales de fuera de España", culmina.