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La presencia de un lobo cerca de Barcelona ha sido captada por los trabajadores del parque de la Serralada de Marina en Santa Coloma de Gramenet, que detectaron por primera vez la incursión de este animal por el área metropolitana de la capital catalana.
El ejemplar fue visto en marzo de 2022 y se trata de "un avistamiento puntual", por lo que este lobo no está asentado en la zona y solo ha sido visto una vez, según ha avanzado El Periódico y han confirmado fuentes de Agents Rurals a la web de Informativos Telecinco.
"Hicimos un seguimiento y no se detectó ningún indicio. Fue una presencia puntual", explican sobre una incursión de un animal en territorio catalán, donde hay cuatro lobos identificados.
Uno de ellos en Moianès (Barcelona), por lo que podría tratarse de este ejemplar. "Hay que tener en cuenta que recorren muchos kilómetros. No es descartable que fuese este lobo, que hiciese una incursión en esta zona y luego volviese donde está asentado", añade Agents Rurals.
Las cámaras de fototrampeo instaladas en la Serralada de Marina captaron por primera vez a un lobo por el área metropolitana de la Ciudad Condal. "No es que tengamos un lobo que está presente en Barcelona. Dio la casualidad que lo vieron. Pero este animal pasa por muchos lugares que no detectamos".
Asimismo, los cuatro ejemplares que permanecen en el territorio catalán son todos machos. Uno está en el Alt Empordà (Girona), el otro por el Alta Ribagorça (Lleida), un tercero por el Solsonès (Lleida), y el último en Moianès.
Las poblaciones de lobo prácticamente desaparecieron de Cataluña a inicios del siglo XX. A partir del año 2003, se empezaron a hacer las primeras identificaciones, sobre todo en la zona del Cadí y del Ripollès.
Veinte años después, en Cataluña no hay una población reproductora establecida de lobos, a pesar de que hay presencia de individuos aislados, que son animales que provienen de la dispersión natural de la población de este animal presente en Francia.
El Departament d'Acció Climàtica ha creado un grupo de trabajo para evitar una posible presencia de más lobos, que está integrado por representantes del sector ganadero, el ambiental y expertos.
El objetivo es impulsar la prevención y la gestión del conflicto con el lobo "si finalmente se arraiga una población estable en Cataluña". También se quiere minimizar los conflictos sociales asociados que se puedan derivar de una posible presencia reproductora y aumentos de ejemplares en Cataluña.