Seis presos solicitan el cambio de género para ir al módulo de mujeres en Asturias
Uno de los prisioneros solicitantes de cambio de sexo lo habría hecho "de repente", sin haberse identificado públicamente como mujer antes
El CSIF pide a la Secretaría General que redacte una nueva normativa, acorde con la actualización de la ley, puesto que el protocolo actual es el de 2006
El artículo de la ‘ley trans’ que cierra la puerta a las 'trampas': “Lo de Torrelodones es un caso claro de fraude”
Seis reclusos de la cárcel de Asturias han formulado una solicitud al Registro Civil de Llanera (Asturias) para cambiar la mención registral de su sexo, según lo establecido en el artículo 43.1 de la 'ley trans' 4/2023 para convertirse legalmente en mujeres y ser trasladados al módulo correspondiente.
Fuentes penitenciarias han explicado a este diario que al menos uno de los prisioneros solicitantes de cambio de sexo lo habría hecho "de repente", sin haberse identificado públicamente como mujer antes. Y sospechan que, de aceptarse la rectificación de su sexo y el traslado de módulo, casos como este puedan generar un "efecto llamada" en otras prisiones españolas.
MÁS
Sobre el ingreso en prisiones femeninas de mujeres trans, algunos colectivos feministas y partidos de la oposición argumentan contra la autodeterminación de género recogida en la recientemente aprobada ley trans, asumiendo que podría suponer un peligro para las internas cisgénero, puesto que esta no establece ningún protocolo específico para el tratamiento de los casos penitenciarios.
El procedimiento a seguir tras la petición de los seis presos de Asturias depende de la Instrucción de 2006, cuando el Ministerio del Interior aprobó un procedimiento gracias al cual los reclusos pueden pedir un cambio de módulo acorde a su "género sentido", incluso, en algunos casos, aunque no hayan cambiado su sexo en el registro.
Ahora la Central de Sindicatos Independiente y de Funcionarios (CSIF) pide a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias que redacte una nueva normativa, acorde con la actualización de la ley, puesto que esta aún no ha remitido información a los centros penitenciarios sobre cómo deben proceder los funcionarios de prisiones en casos como el de los seis presos trans de Asturias.
No es el primer caso
Las cárceles dependientes de la administración central, todas menos las del País Vasco y Cataluña, ya acogen actualmente a 79 personas transgénero, desde la aprobación del mencionado protocolo hace 17 años.
De estas 79 personas transgénero en las cárceles españolas, 22 son mujeres que viven en cárceles exclusivamente femeninas o en módulos de mujeres dentro de prisiones mixtas. Otros seis son hombres hombres en instalaciones masculinas, y no se ha detallado ni el género y la ubicación de los otros 51 internos.
Las personas trans representan, aproximadamente al 0,17% de los más de 46.000 reclusos que albergan las cárceles en España actualmente. Para la población general, el dato es más elevado: la Organización Mundial de la Salud estima que entre el 0,3% y el 0,5% de la población mundial es trans.
El protocolo actual
La decisión de en qué módulo se internará a cada preso la toma un equipo técnico, del que forman parte tanto educadores y psicólogos como trabajadores sociales y el protocolo del Ministerio de Interior de 2006, que sigue en vigor, establece como requisito para el cambio de módulo la superación de una valoración médica y psicológica, así como el reconocimiento de la identidad psico-social de género.