Caso Morate. A horas del juicio la madre de Laura dice"va a ser duro, pero mi hija reclama justicia"
María hace un esfuerzo por salir, por llevar el día a día. Pero desde hace dos años y poco más de dos meses, la vida se hace muy cuesta arriba. María es la madre de Laura, la pequeña de sus tres hijas. Laura murió asesinada, igual que su amiga Marina. Y el hombre acusado de hacerlo se sienta a partir del lunes 23 de octubre en el banquillo de la Audiencia provincial de Cuenca. Un jurado de siete hombres y dos mujeres, será el tribunal que escuchará la declaración de 39 testigos, de medio centenar de policías, y de los peritos.
María y su familia temen tanto como esperan el juicio. Saben que va a ser duro "revivir todo, esas imágenes terribles", dice; pero enseguida afirma que quiere estar presente, ver al acusado Sergio Morate, cara a cara "lo haré por mi hija Laura. Porque siento que me dice mamá estate ahí, para que se haga justicia. Y eso pedimos, JUSTICIA, con mayúsculas". Tanto ella como sus hijas y la familia de Marina, declararán como testigos. "Yo solo puedo repetir lo que pasó: a las cinco de la tarde mi Laura salió tan feliz, tan bonica como era ella, con su bolso y su pantalón corto y me dijo, "mámá me voy a tomar algo con Marina", y ya no la vi más"
Laura se fue a acompañar a su amiga Marina. Ella se lo pidió. Sergio Morate, su exnovio la había llamado para que fuera a su casa a recoger pertenencias de cuando convivían. habían sido pareja al menos cuatro años. Pero Marina cortó, se marchó a su Ucrania natal y se casó con otro. Sergio Morate tenía planeado, según la investigación matarla. Programo y preparó el crimen. Marína no quiso ir sola a la casa. Conocía el carácter violento de Morate, que había cumplido condena por violencia de género con otra pareja.
Cuando Marina y Laura entraron en la casa de Morate (que había intentado disuadir a Marina de que fuera acompañada), él cerró la puerta tras ellas. Se levó a Marina a una habitación y la golpeó, luego la asfixió con una brida en el cuello. Laura quiso escapar, él se lo impidió. la golpeó y la estranguló. Según la investigación metió los cadáveres en bolsas industriales y los bajó a coche en el garaje. Llamó a un amigo colombiano para que lo ayudara, pero éste se quitó de enmedio.
Morate condujo hasta el pueblo de Palomera, a 9 kilómetros de Cuenca, y cenó, mientras dejaba losca´daberes en el coche. Luego los llevó a unos 3 kilómetros hasta el nacimiento del río Huécas, en el paraje de El Bodegón. Solo tenía había cavado un hoyo y tuvo que agrandarlo para intentar enterrar los dos cuerpos. Pero se cansó, como diría tiempo después a unos policías que lo custodiaban hasta los juzgados de Cuenca, "tuvo agujetas varios días"
Allí encontró un vecino del pueblo, los cadáveres semienterrados de Laura y de Marina, seis días después de la desaparición. La policía había localizado a Sergio Morate, que huía de España para llegar a Rumanía. Allí fue detenido horas después, cuando sus supuestas víctimas aún estaban en el tanatorio. Fue extraditado y lelgó a España el 5 de septiembre. Un mes después de que presuntamente cometiera el doble asesinato. Y desde entonces está en la cárcel madrileña de Estremera. Piden para él 48 años de cárcel, 25 años por el asesinato de Marina, con agravante de violencia de género, y otros 23 por el asesinato de Laura.