Mata a una prima despues de intentar estrangular a su expareja
El hombre que está detenido por matar a Ana Gilda, de 55 años, no era, ni nunca fue su pareja. Pero su agresión está relacionada con la violencia de género. Dominicano, como su víctima y su entorno, el presunto asesino, 29 años, mató a Ana, después de que no consiquiera acabar con su expareja en Caudete, Albacete.
La mañana del jueves 18, el presunto asesino intentó estrangular a su expareja en su casa del pueblo albaceteño. Tenía una orden de alejamiento, impuesta tras un juicio rápido hace un mes. No logró matarla y huyó del domicilio lleno de rabia. La mujer lo denunció por quebrantar el alejamiento ante la Guardia Civil, que activó el protocolo de violencia de género. Advirtió a los agentes que tenía intención de agredir a su tia (madre de Ana Gilda) por intervenir en sus relaciones, por advertirla de que era violento.
La mujer, de edad avanzada, ha reconocido a Informativos Telecinco, que el agresor la había amenazado de muerte, además de a sus hijas, a la novia y a la madre de éstá. "Tenía el diablo en el cuerpo", dice la mujer. Por eso ella, asustada, se había escondido en casa de una amiga. Mientras la Guardia Civil la buscaba para protegerla, desplegaba un operativo por las calles de Caudete para detener al agresor. Temían que volviera a intentar la agresión con la expareja o con alguien de su familia.
El presunto agresor burlo el dispositivo policial, incluso a los agentes que estaban delante de la puerta del centro de mayores, donde la víctima llevaba la cafetería desde hace muchos años. El lugar del crimen. Buscaba a la madre, pero solo encontró a Ana. Intentó agredirla. Según un testigo, ella iba corriendo, pidió auxilio, y él detrás de ella, no pudieron detenerlo y cumplió su propósito. Mientras apuñalaba a la mujer llegó la Guardia Civil, y la emprendió con ellos, antes de ser detenido. Permanece en el calabozo de la Guardia Civil de Almansa y el sábado pasa a disposición judicial.
Contra el maltrato, llamada gratuíta al 016. No deja rastro en la factura, pero hay que borrar la llamada del teléfono