La Audiencia Provincial de Málaga ha condenado a un hombre por intentar asesinar a otro, al que golpeó en la cabeza con un palo en la puerta de un bar para robarle una riñonera en colaboración con un amigo, que también ha sido condenado, en este caso a dos años de cárcel.
El principal procesado ha sido condenado por un delito de asesinato en grado de tentativa y robo con violencia y además no podrá aproximarse a la víctima a menos de 500 metros de su persona, domicilio, lugar de trabajo o cualquier lugar frecuentado por el mismo durante ocho años, según la sentencia, a la que ha tenido acceso EFE.
En los hechos probados se relata que los dos acusados se encontraban en la puerta de un bar junto con otros clientes que habían salido a fumar y, en un determinado momento, comenzaron una discusión con la víctima que había acudido al establecimiento en compañía de otros amigos.
Durante la discusión, los dos procesados "con el propósito de obtener un beneficio patrimonial ilícito, le exigieron al otro la entrega de la riñonera" y, al mismo tiempo, se la arrebataron de un tirón y le advirtieron de que si no accedía lo iban a matar.
La víctima, que llevaba dentro de la riñonera su documentación, un teléfono móvil y 25 euros, reaccionó y quitó a uno de los acusados de un tirón el bolso que previamente le había sustraído y todavía portaba en la mano, momento en el que el procesado le golpeó fuertemente en el rostro.
Ese momento fue aprovechado por los acusados para hacerse con los efectos de la víctima, quien, "para evitar que pudieran atacarle y ante el temor de sufrir un mal mayor, intentó abandonar el lugar y se dirigió caminando hacia la otra acera", aunque el mismo acusado que ya le había golpeado le siguió, según la sentencia.
Aprovechando que la víctima estaba aturdida por el golpe anterior y que caminaba de espaldas, el acusado, de manera sorpresiva y a sabiendas de que carecía de cualquier posibilidad de defensa, la golpeó fuertemente en la cabeza con el palo que portaba.
La víctima ha sido sometida a tres intervenciones quirúrgicas y ha necesitado para su sanación 425 días de perjuicio personal en estado grave y 23 días en grado muy grave.
Actualmente necesita apoyo para andar y silla de ruedas y sufre importantes secuelas, además de estar impedido para la realización de cualquier actividad laboral.
Como indemnización, el Tribunal estima que el principal acusado debe pagar casi 341.000 euros por las lesiones, la incapacidad y las secuelas, además del perjuicio moral por pérdida de calidad de vida muy grave, así como otras cantidades que se determinarán más adelante por la rehabilitación y otros gastos por la pérdida de su autonomía personal.
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