Una feliz Carolina Marín se deja ver por la Catedral de Huelva, ciudad que la homenajeará

Aunque ya el refrán de "la procesión va por dentro" pueda ser ejemplo de lo que está viviendo Carolina Marín tras su grave lesión de rodilla, la deportista no pierde la sonrisa. Este sábado se ha dejado ver por la Catedral de La Merced en Huelva.

Con un vestido elegante y muy feliz con motivo de la boda a la que había sido invitada, la onubense apareció deslumbrante entre los demás asistentes. Ya a finales de agosto la vimos también acudiendo a la playa, en un vídeo que ella misma compartió.

Hoy ha hecho lo mismo, al publicar en sus redes sociales unas imágenes del acontecimiento en su ciudad natal. La campeona olímpica de Río de Janeiro en 2016 lució un look compuesto por dos piezas, en naranja y azul.

Acompañado de unos grandes pendientes de ese último color. A la jugadora de bádminton le hicieron varias fotografías, algunas con los protagonistas del enlace matrimonial. Sigue aprovechando su recuperación en casa para disfrutar de momentos como este.

Ya lo reconoció ella misma en una reciente entrevista con el periódico Marca: "Estoy haciendo otro tipo de cosas que, por el deporte, no hago, y una de ellas es pasar más tiempo con mi familia, me ha levantado mucho el ánimo".

Carolina Marín ha admitido en su publicación en Instagram lo contenta que estaba por poder acudir a la ceremonia. "Cómo me alegro de haber estado contigo en un día así", expresa la tricampeona del mundo, citando a la novia recién casada.

Homenaje el jueves en su Huelva

Justo en la tierra donde nació, Huelva capital, el ayuntamiento le rendirá un homenaje el próximo jueves 19 de septiembre. Pondrá en valor la trayectoria profesional de la volantista, quien a sus 31 años es una de las grandes figuras del deporte español.

De hecho, en unas semanas también recibirá en sus manos el Premio Princesa de Asturias de los Deportes. Antes, en unos días se rodeará del cariño de sus paisanos. Se espera un acto multitudinario en la capital onubense, donde hablará ante el público.

Porque, aparte de los logros y éxitos que ha conseguido con la raqueta, Carolina Marín es todo un ejemplo de valentía, superación y esfuerzo. Conceptos que bien pueden aplicarse a la vida, en general, de cualquier persona que atraviesa dificultades.

Su lema "puedo porque pienso que puedo" nos ha demostrado a lo largo de su carrera la capacidad de resiliencia que tiene la andaluza. Ahora afronta su tercera recuperación de la rotura del ligamento cruzado. Y lo hace sonriente.

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