Reducida la condena de un joven acusado de abusar de una menor por la ley del 'solo sí es sí' en Andalucía
El joven estaba acusado de haber abusado sexualmente de una menor de 14 años a la que conoció a través de Instagram
El acusado alegó desconocer la edad de la víctima y afirmó que las relaciones mantenidas fueron totalmente consentidas
Tendrá que indemnizar a la joven con 3.000 euros y no se podrá acercarse ni comunicarse con ella en 12 años
La condena de un joven acusado de abusar sexualmente de una menor de 14 años a la que conoció a través de Instagram ha sido rebajada de nueve a seis meses años de prisión por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) debido a la ley del ‘solo sí es sí’.
La sentencia de la Sala de lo Civil y Penal del TSJA, ha desestimado el recurso del acusado después de que alegara que desconocía la edad de la adolescente y que, en todo caso, fueron relaciones consentidas. Sobre esto último, el alto tribunal andaluz aclara que para que este argumento tenga validez debe existir, no sólo un consentimiento de la menor, sino una proximidad en la edad y el grado de madurez de ambos.
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La Sala lo descarta pues se llevaban cinco años y los informes psicológicos no aprecian una igualdad entre ambos a nivel madurativo. Así, y aunque desestima el recurso del acusado, el TSJA ha revocado parcialmente la sentencia de la Audiencia de Granada que lo condenó para aplicar de forma retroactiva la que es en la actualidad la norma más favorable al acusado, tal y como exige la ley.
La pena ha sido rebajada de nueve años a seis, más una indemnización y una serie de inhabilitaciones
Así, le condena ahora por un delito de agresión sexual a menor de dieciséis años y rebaja su pena de nueve a seis años de cárcel. Junto a ello deberá cumplir seis años de libertad vigilada, indemnizar a la menor en 3.000 euros y no podrá acercarse o comunicarse con ella durante doce años, a lo que se suman distintas inhabilitaciones especiales para acoger o trabajar con menores.
Los hechos se remontan a diciembre de 2018, cuando el joven, que tenía 19 años y trabajaba como repartidor en un restaurante, mantuvo relaciones sexuales con la víctima, a la que conoció por Instagram y que acababa de cumplir 14 años. Fue la madre de la joven la que denunció los hechos ante la Guardia Civil.
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