En la continua lucha contra el terrorismo en nuestro país, tanto con detenciones como con condenas a líderes de grupos, se ha conocido el contenido de un auto de la Audiencia Nacional relacionado con el presunto yihadista arrestado en Níjar (Almería).
Europa Press ha tenido acceso al documento y en él se recoge que el hombre, de 46 años, tenía "una gran cantidad de contactos de índole radical" en "varias" de sus redes sociales. Así como "amistades que podrían tratarse de miembros directos del Daesh en zona de conflicto".
Así lo apunta la investigación del caso. Cliente de una app alternativa de comunicación "mucho más segura y privada que otra más conocida, a través de ella hizo envíos masivos de más de 100 archivos bajo el "nombre de 'Cánticos Yihadistas'".
Aunque, "gran parte" de ellos estaban "borrados" ya, sí que se le intervino un dispositivo de almacenamiento USB que contenía archivos "cifrados". Los investigadores lograron romper siete de ellos. "En mayor o menor medida" se "alaba y fomenta la yihad, los mártires caídos en combate y al Estado Islámico".
Eso detallan las actuaciones, en las que se indica que, se encontraba inmerso en un proceso iniciado "de manera voluntaria y sostenido en el tiempo" de radicalización. Con la posibilidad siempre en el horizonte de poder llegar a ejecutar "una acción violenta".
Precisan que la Policía Nacional pudo "confirmar parcialmente" su "hipótesis" de que se encontraba manteniendo "conversaciones de índole privado" con "miembros directos de Daesh" tras el análisis "parcial" de su teléfono móvil, si bien "no" ha sido "posible acceder al contenido".
Ya que mantenía unas altas medidas de seguridad. El individuo se encargó presuntamente del borrado "parcial o completo" de los archivos que tenía en su poder. Otros cuatro pendrive fueron localizados "ocultos" bajo el asiento delantero de su coche, "tras un cajón".
Todos tenían "un amplio contenido yihadista". En el seguimiento de los grupos en aplicaciones de mensajería considerados como "centros de reclutamientos virtuales", los agentes localizaron a este vecino de Níjar en un total de 14.
En todos ellos la temática era "radical yihadista": se difundían "links, videos e imágenes con un alto contenido de violencia explícita del Daesh". Su presencia en estos grupos no sólo era "pasiva, observando y teniendo acceso a todo el contenido, si no también activa".
Y es que se detectaron dos chats "borrados" con dos extranjeros que en su foto de perfil, "al menos uno de ellos", tenía la imagen en el perfil "de un portavoz del brazo armado de Hamás". La otra conversación era "en una red social con una mujer que estaría ubicada en un campo de refugiados sirio".
El investigado, quien continúa en prisión provisional como presunto autor de un delito de adoctrinamiento yihadista, fue localizado en un "patrullaje virtual" efectuado en 2023. La Fiscalía considera también esa actividad para imputarle.
Si bien el detenido quiere darle "un matiz exclusivamente religioso" a su comportamiento, los datos aportados "pueden implicar una actitud que va más allá de la simple creencia religiosa, lo que no sería objeto de infracción criminal", explica.
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