Hace ya 20 años que Esther sabe que es adoptada. Desde entonces ha intentado saber algo más sobre su familia biológica pero su búsqueda solo encontraba trabas... hasta que hace poco una amiga le contó que había oído que tenía una hermana. La sospecha se ampliaba cuando un enfermero la confundió con una vecina de un pueblo de Granada.

"Me enteré de que soy adoptada por curiosidad a los 27 años", dice Esther de la Cruz. Sus padres adoptivos no le habían dicho nada, pero en su libro de familia ella aparecía dos meses después de su nacimiento. "Nunca me lo dijeron", explica a NIUS. Lo que sí le contaron es que ella había nacido en Armilla (Granada)... y aquello también sonaba raro.

"Armilla no tenía hospital y yo nací con espina bífida", dice Esther. Para despejar dudas se presentó en el Juzgado de Paz de Armilla en busca de su partida de nacimiento y allí mismo se lo confirmaron. Sin embargo, en el documento no venía el nombre de sus padres biológicos. Solo aparecían dos fechas: el 6 de junio y el 20 de julio. La primera era su nacimiento, la segunda, la fecha en la que apareció abandonada.

Era 1975 y Esther fue acogida por el Hogar Infantil Niño Jesús de Armilla. Allí también intentó buscar respuestas, pero fue imposible. "Lo cerraron hace muchos años, en los setenta o principios de los ochenta", explica a NIUS. Así que solicitó información a través de la Junta de Andalucía. "Me respondieron enseguida diciendo que no había nada de 1975", dice Esther, "solo había a partir de 1987".

Cada puerta a la que llamaba parecía estar cerrada para Esther... hasta que hace algo más de un año se le abrió una pequeña ventana a la esperanza. "Una amiga de Churriana me dijo que había oído que yo tenía una hermana melliza en el hospicio donde me adoptaron", cuenta a NIUS, "pero mis padres decidieron adoptarme a mi al ver mi discapacidad". 

De hecho, la malformación con la que Esther nació le impidió andar hasta que cumplió los cuatro años... y lo hizo sobre todo gracias al esfuerzo de sus padres adoptivos. "Mi madre nunca se rindió", cuenta orgullosa Esther, que considera a la adoptiva su verdadera familia. Hoy sus padres han fallecido, pero su hermano le apoya en su búsqueda.

"Él tenía tan solo 12 años cuando yo llegué", dice Esther sobre su hermano mayor, que recuerda verla en el hospital cuando era tan solo un bebé. "Me dijo que era el Hospital San Juan de Dios en Granada", cuenta a NIUS. Sin embargo, no recuerda mucho más de este puzle, cuya última pieza se acaba de colocar hace solo unas semanas.

"Tú eres de La Zubia", le dijo de repente un enfermero a Esther en un centro donde hace rehabilitación... Pero ella nunca había estado en ese pueblo de Granada. "Es que te pareces un montón a una conocida", le insistió el enfermero, con el que no ha vuelto a coincidir de momento. Desde entonces sus sospechas se han centrado en este pueblo de la comarca de la Vega granadina.

Hace unos días, se ha animado a publicar su foto en un grupo de Facebook compuesto por vecinos de La Zubia. "Si alguien me saca parecido agradecería la información que me pudieran dar", ha escrito Esther en busca de respuestas una vez más. "Es curiosidad, no es una necesidad", cuenta a NIUS, "me gustaría saber si tengo otros familiares, primos, tíos...".

Aun así, Esther asegura que le daría mucha alegría encontrar a su hermana. "Supongo que al principio sería un poco raro para las dos", dice Esther, "ella ni siquiera sabe de mi existencia y me planteo hasta qué punto tengo derecho a trastocarle la vida". Una duda más para una incógnita que le ha acompañado toda la vida.