Un chico transgénero de 23 años ha denunciado a una examinadora de Tráfico de Almería por un delito de odio por dirigirse a él de forma reiterada como mujer durante un examen de conducir.
La examinadora utilizó el nombre femenino que le fue asignado al nacer a pesar de su evidente apariencia masculina y de que el joven le pidiera que le llamara por su nombre de varón.
El padre del joven, ha explicado a Europa Press que los hechos tuvieron lugar el pasado día 14 de febrero. Su hijo le llamó por teléfono "afectado" desde la autoescuela para pedirle que fuera a recogerlo tras haber realizado la prueba práctica del carné de conducir y haber suspendido, según avanza además el diario 'La Voz de Almería'.
"Cuando llegué estaba sentado en un escalón, completamente blanco", ha narrado su progenitor, quien ha detallado que su hijo le confesó haberse sentido "humillado por parte de una de las examinadoras" por dirigirse a él por su "antiguo nombre y género" tanto al ser llamado para hacer la prueba como durante el desarrollo de la misma y en presencia de otras personas.
El denunciante asegura que cuenta con el testimonio tanto de su profesora de la autoescuela como de otro usuario que también se examinaba ese día. También ha indicado que Tráfico tenía en su poder la documentación de la partida de nacimiento rectificada así como correos electrónicos remitidos desde la autoescuela en la que se advertía del nombre y género del afectado.
"Tanto el testigo como la profesora vieron además que tenía a bolígrafo el nombre de él", ha relatado el padre del chico, quien ha explicado que “él está hormonado desde hace muchos años, tiene barba, no cabe confusión", ha defendido el padre.
El joven, pese a sentirse "humillado", optó por realizar la prueba al constatar que la examinadora "no aceptaba que es un hombre", de modo que al terminar el examen le comunicaron que había suspendido por una falta "muy grave" en una intersección.
Algo que rechazan el resto de los testigos que iban en el coche. Según han detallado, lo habría cometido al inicio del ejercicio y la prueba no se detuvo en ese momento. Esto ha motivado además que la denuncia sea interpuesta también por una presunta prevaricación administrativa.
Ante tal situación, el joven y su padre acudieron a las dependencias de la Jefatura Provincial de Tráfico para pedir explicaciones así como una disculpa, pero no fueron recibidos ni por la examinadora, ni el jefe, ni el responsable de la Jefatura Provincial de Tráfico, de modo que fueron los dos funcionarios que los recibieron quienes le trasladaron unas "disculpas".
La familia del joven ha interpuesto ante el juzgado una denuncia por estos hechos, de forma que dos días después no han recibido llamada de la Jefatura Provincial de Tráfico, desde donde sí se ha contactado con la autoescuela. Además, han solicitado una audiencia con el subdelegado de Gobierno, José María Martín.
Por su parte, desde la Jefatura Provincial de Tráfico se ha abierto un expediente informativo para aclarar lo sucedido.