José Francisco, primer titulado universitario nacido en Los Asperones: "Animo a todos los niños de barrio a estudiar"

Se llama José Francisco Gómez Heredia, es gitano, tiene 27 años y nació, se crió y sigue viviendo en la barriada malagueña de Los Asperones. Entre sus calles jugaba de niño, fue al colegio y al instituto, y, a pesar de la incredulidad de sus vecinos y amigos, ha logrado superar el muro de cristal que separa este barrio marginal con las facultades del campus de la Universidad de Málaga (UMA).

De hecho, su gesta no ha pasado desapercibida para nadie y este martes se ha convertido en el protagonista del reconocimiento que desde la UMA han querido hacerle en el CEIP María de O, donde inició sus estudios. Porque José Francisco se ha convertido en el primer joven de Los Asperones que finaliza un título universitario. En su caso, el grado en Educación Social.

Y esto le ha servido para conseguir también una de las 'Estrellas' que, como cada año, el profesorado del centro de educación infantil entrega en la 'Fiesta de la Educación' con motivo del Día del Pueblo Gitano en Andalucía. Un acto al que también han acudido representantes de la entidad universitaria, cuyo rector, José Ángel Narváez, ha impuesto la beca a Gómez Heredia.

Narváez ha reivindicado "la integración del pueblo gitano para construir un país mejor" y ha defendido que "la vecindad de la Universidad con Los Asperones nos enriquece porque nos hace mirar el mundo de una manera distinta" y ha animado a la comunidad gitana a que "os acerquéis a la Universidad" porque "vais a hacer que seamos mucho mejores".

En cuanto al galardonado, ha reconocido sentirse nervioso y abrumado por la presencia de todos los medios de comunicación que registraban ese momento tan importante para él, al que, por desgracia, no han podido acudir sus padres por encontrarse trabajando. Sí que ha estado presente su hermana, también universitaria.

"Tengo ganas de seguir estudiando y formándome, a pesar de que ha habido momentos difíciles y en los que he tenido ganas de tirar la toalla. Pero he seguido adelante por mí y por mis padres, que siempre han creído en mí", comenta José Francisco, quien también cuenta que quiere ser un ejemplo para que se termine con la "mala impresión" de la comunidad gitana.

"Es como si los gitanos no tuviéramos que estudiar. Más de una vez he tenido que responder a la pregunta de por qué estudio si los gitanos no estudian. Esos prejuicios nos hacen mucho daño y hacen que otros jóvenes decidan no esforzarse por conseguir lo que quieren", lamenta el homenajeado.

Y en este sentido, ha animado a los niños del barrio a que sigan estudiando porque "es un modo de rebelarse y de cambiar la imagen que se tiene de los gitanos". "Que estudien hasta donde cada uno pueda porque es el único modo de tener una buena calidad de vida", reivindica José Francisco.