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La Guardia Civil ha detenido a dos hombres de 34 y 21 años como presuntos autores de un delito de robo en el interior de un domicilio de La Zubia (Granada), del cual presuntamente se llevaron 400 euros y joyas valoradas en 20.000 euros, según ha informado el cuerpo en un comunicado.
Los delincuentes entraron al domicilio de la víctima con una copia de la llave de su propia casa. La consiguieron porque uno de los detenidos comparte gimnasio con la ella en la capital y allí fue donde le quitaron las llaves de la taquilla, hicieron las copias y le volvieron a dejar las llaves en el bolso sin que se diera cuenta de nada.
La Policía Nacional sorprendió a uno de los detenidos cuando se disponía a vender numerosas joyas en un comercio de compra venta de oro situado en Granada. La coordinación de ambos cuerpos ha hecho posible la recuperación de las joyas robadas.
Los detenidos, ambos con antecedentes policiales, tenían experiencia en este tipo de robos ya que ambos cumplían condena por hechos similares, encontrándose en el momento de la detención en libertad condicional.
La Guardia Civil averiguó que los detenidos habían preparado el robo con meticulosidad. El mayor de los dos detenidos, el de 34 años, estuvo vigilando a la víctima en el gimnasio y cuando ésta dejó sus llaves dentro de un bolso de deporte en la taquilla y se marchó, el arrestado abrió la taquilla, cogió las llaves del bolso y se las entregó a su compinche, el joven de 21 años, que salió corriendo hacia una ferretería cercana para hacer la copia. Mientras tanto, el primer detenido estuvo vigilando que la mujer no apareciera.
Cuando el joven regresó con las llaves, una vez copiadas, se las dejaron de nuevo en el bolso y esperaron a que se marchara a su casa. La persiguieron para averiguar donde vivía y la estuvieron vigilando hasta que los delincuentes pudieron comprobar que la casa estaba siempre vacía los sábados por la mañana. Así, el día 24 de septiembre entraron a la vivienda, lo registraron todo y se apoderaron de 400 euros en metálico y de 20.000 euros en joyas.
Después del robo, uno de los dos detenidos fue sorprendido por agentes de la Policía Nacional, que realizaban una inspección en un comercio de compra venta de oro, cuando intentaba vender las joyas. Se trataba de un conocido delincuente al que ya habían detenido un año antes y al que intervinieron las joyas al no poder acreditar su procedencia.
El intercambio fluido de información entre los investigadores de La Policía Nacional y de la Guardia Civil de Granada ha servido para resolver este robo. La Policía Nacional envió a los investigadores de la Guardia Civil de La Zubia unas fotografías de las joyas incautadas y la víctima las reconoció sin ninguna duda como suyas.
El trabajo posterior de los agentes de La Zubia fue demostrar quién había perpetrado el robo. Estos averiguaron que la víctima y la persona a la que la Policía Nacional le intervino las joyas compartían gimnasio, los investigadores fueron a dicho gimnasio para analizar las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad del establecimiento. En ellas, consiguieron identificar a los dos detenidos y ver cómo estos sacaban las llaves del bolso de la víctima y luego las restituían.