Se lidiaron toros colombianos de Ernesto Gutiérrez bien presentados, destacaron los toreados en cuarto, quinto y sexto lugar.
Rodríguez. Palmas y oreja.
Benítez. Palmas y dos orejas.
Morante de la Puebla. Aviso y dos Orejas.
Rodríguez lució con la alta doma de su cuadra, dejando en todo lo alto rejoncillos de castigo, farpa y la suerte de la rosa, mató desde la silla; con su segundo un jabonero sucio, bravo y enrazado, le realizó vistoza faena con asiento en todas las suertes que fué premiada con oreja.
Benítez saludó con sentidas verónicas a su primero, clavó tres pares de garapuyos, sobria faena sobre los dos pitones a un toro difícil al que finiquitó de pinchazo y estocada; al cuarto lo toreó valiente con la capa, adornó con los seis palos el morrillo y plasmó largo y valiente trasteo con mandonas series con la diestra y emotivo redondo antes de matar en los medios recibiendo, enterrando la espada hasta la cruz.Dos orejas.
Morante tuvo destellos y ganas de buen torear, pero se encontró con un toro difícil al que liquidó de varios pinchazos y descabello; al sexto lo bordó toreando con la capa, se gustó en largas y armoniosa faena con templadas tandas con la diestra y por naturales que enloqueció los tendidos, se adornó con primorosos remates y con firmeza de planta, mató por arriba de pinchazo y estocada, que premiaron con dos merecidos trofeos.
Benítez y Morante fueron sacados a hombros al terminar la corrida.