Mary Bale, de 45 años ha sido condenada a pagar una multa de 250 libras (284 euros) por el causar sufrimiento a un animal. La mujer ha reconocido su error y ha admite haber causado un daño innecesario al animal.
La Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales denunció a la acusada, que se enfrentaba a una multa de 20.000 libras y seis meses de prisión. Sin embargo, la jueza Caroline Goulborn ha rebajado la multa de 250 libras alegando que el animal no resultó herido y que Bale ya ha sido bastante vilipendiada por la prensa y acosada por Internet. Además, la ya conocida en la Red como Cat Woman tendrá prohibido tener animales domésticos en los próximos cinco años.
En el vídeo, Bale aparece caminando por una calle de Coventry (Inglaterra) cuando ve a una gata subida a un muro. Se acerca a acariciarla e inesperadamente lo arroja a un contenedor de basura.
Lola, el felino, estuvo unas quince horas atrapada en el contenedor hasta que los maullidos alertaron a sus dueños quienes, al ver las imágenes tomadas por una cámara de seguridad, decidieron subirlas a la Red a modo de denuncia. Las imágenes no tardaron en dar la vuelta al mundo y medios digitales, periódicos y televisiones las publicaban con indignación. Millones de internautas que exigían justicia y una dura condena para la empleada de banca.
Ante tal revuelo, Bale pidió disculpas públicamente aunque no entendía por qué se había armado tanto lío, ya que es sólo un gato y se trataba de una broma.
Estas declaraciones sólo incrementaron las iras de los internautas, que crearon grupos en Facebook que expresaban su odio y llegaron a amenazarla de muerte.