Un 15 % las chicas que han sufrido relaciones sexuales no consensuadas en su primer encuentro de este tipo y en un 31 % los menores que dicen aprender "mucho" sobre sexo con pornografía. Así lo revela un estudio sobre la cultura del romance juvenil y su impacto en el rendimiento académico elaborado por la Universidad de Granada y que deja datos preocupantes sobre la percepción de la pornografía, los celos y la ciberviolencia.

El estudio revela una violencia de género vinculada a dinámicas afectivo-sexuales marcadas por estereotipos y desigualdades de género persistentes en la sociedad actual, ya digitalizada, que además afectan al rendimiento académico y al bienestar emocional de la juventud, especialmente a las chicas.

La investigación ha incidido en la necesidad de apostar por la educación sexual integral en el currículum escolar desde edades tempranas para modificar los datos de un estudio desarrollado entre octubre de 2021 y junio de 2023, con más de 400 encuestas y 237 entrevistas en profundidad.

Entres los datos del estudio destaca que más del 15 % de ellas reconoce haber sufrido experiencias no consensuadas durante su primera relación sexual, porcentaje que triplica al de ellos.

La ciberviolencia también ocupa un lugar protagonista en el estudio, con un 42 % de los estudiantes que reconoce utilizar redes sociales para controlar las actividades de sus parejas en conductas que se suman a una "cultura de la violación" por la que las chicas encuestadas narran abusos que "normalizan".

La investigación también ha alertado del uso de la pornografía como fuente de aprendizaje, la que utilizan casi el 32 % de los chavales de 15 años, lo que distorsiona la sexualidad especialmente en ellos.

Aunque un 19,8 % de jóvenes considera que los celos son una prueba de amor y un 29,1 % no tiene una opinión formada al respecto, existe una diferencia de género en la percepción de los celos como prueba de amor ya que casi cuatro de cada diez chicas los rechazan.

Además, el 42 % de jóvenes admite usar las redes sociales para controlar a su pareja, un control que es mayor por parte de los chicos, que defienden un concepto de amor tóxico, con casi un 30 % de los encuestados que admite poner trampas a sus parejas, según el estudio TraSPASA (Trayectorias de Éxito/Abandono en Secundaria Profesional desde el Análisis del Romance Juvenil en la Actual Sociedad Andaluza Digital), una investigación que ha analizado la cultura del romance juvenil con estudiantes andaluces de entre 14 y 36 años..

El estudio, además, refleja que el 20 % de los alumnos reconoce que tener pareja afecta a su rendimiento, lo que se suma a un consumo de redes sociales de hasta seis horas diarias que además facilita que se normalice el machismo, con canciones que cosifican a la mujer.

"Las encuestas alertan: hay una destacada incidencia de la violencia sexual y de género en las relaciones de pareja de la juventud andaluza, y el papel de las redes sociales es amplificador de esta problemática", ha resumido la profesora del Departamento de Sociología y vicerrectora de Igualdad, Inclusión y Compromiso Social de la UGR, Mar Venegas. 

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