Este lunes se cumplen cinco años de la desaparición de Henry Alejandro Jiménez Marín, un joven de 20 años al que se le perdió la pista el 1 de enero de 2019 en Orihuela Costa, en Alicante. El chico salió de trabajar y pasó la Nochevieja junto a un grupo de amigos, con los que despidió el 2018, pero no regresó a casa de su madre, quien le estaba esperando. La progenitora, según reiteró en distintos medios locales, cree que a su hijo lo mató uno de los que fue su compañero de piso durante unos meses, un islandés con el que iba a dejar de convivir para volver con su familia.

La alerta en el entorno de Henry saltó en la madrugada del 1 de enero de 2019. El joven siempre solía contestar, pero aquel día no lo hizo. Su madre, preocupada, decidió emprender una búsqueda que ha durado todos estos años. La familia afirma que las autoridades debieron realizar registros domiciliarios desde el principio y que el joven del que sospechan prestó declaración mucho tiempo después de lo ocurrido. Y es que, tras cinco años, siguen sin noticias sobre el paradero de Henry. No se han realizado detenciones y la investigación ordenada por el juez encargado del caso no ha ofrecido detalles recientemente.

Gina es madre de tres hijos. Uno de ellos, el mediano, es Henry. Desde que tuvo la corazonada de que le pudo pasar algo, no ha bajado los brazos para tratar de dar con él, pero no ha obtenido resultados y ahora tiene que vivir en Inglaterra, alejada de la angustia que le provoca el suceso. Desde la asociación SOS Desaparecidos han seguido la situación de la familia para ofrecer apoyo y mantienen vigente una alerta de búsqueda en redes. Todos quieren resolver el caso de este joven nacido en Colombia que trabajaba en una peluquería y estudiaba para ser Guardia Civil.

La madre de Henry llegó a ver un vídeo en el que supuestamente aparecía su hijo con múltiples golpes. Estas imágenes, que desaparecieron casi al 100% (salvo una pequeña parte, que figura en el sumario del juez), se las mostró uno de los jóvenes que supuestamente pasó la Nochevieja de 2018 con él. Gina afirma que los chicos que estuvieron con su hijo se pusieron de acuerdo a la hora de contar lo ocurrido, es decir, que planearon una coartada. Cree que el islandés que compartió piso con Henry le golpeó por un incidente previo (como le llegaron a indicar) y que Henry intentó huir malherido, sin lograrlo. En definitiva, consideran que no salió de esa casa con vida.

Y es que Henry apareció con una joven también islandesa días antes de desaparecer, en Nochebuena, explicando que ella no quería estar en el piso de estudiantes. Al parecer, no quería por el mismo individuo, quien la pudo agredir. Gina, según recogen medios locales, le pidió a la chica denunciar, pero no hay noticias hasta la fecha. A nivel oficial, no se ha podido confirmar la desaparición involuntaria de Henry, ni se ha hallado su cuerpo. Entidades como la Fundación Europea por las personas desaparecidas, QSDflobal, calificó el caso como "dramático".

Se ruega a la población que, de contar con información relevante sobre este caso de desaparición, se pongan en contacto con las autoridades a través del 112. También se puede contactar directamente con SOS Desaparecidos en los teléfonos 649 952 957 o 617 126 909. La colaboración y la ayuda ciudadana puede resultar clave en numerosos casos.

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