Tras las graves consecuencias que ha tenido la DANA, ningún dirigente político ha dimitido. Muchas veces, los políticos no tienen la formación que se puede presuponer para un alto cargo público. La ley, sorprendentemente, tampoco lo requiere, explica en el vídeo Gabriel Cruz.

Tanto en la ley nacional (de 3/ 2015) como las autonómicas -no hay normativa local- coinciden en que para ser elegido alto cargo, los que mandan a los funcionarios técnicos, hay que ser honorable, es decir, no haber entrado en prisión, e idóneo -sin especificar qué es ser idóneo. Les designa a dedo el presidente, ministro… Como a ella, Salomé Pradas, consejera de Justicia e Interior, que desconocía el sistema de alertas.

Su secretario de emergencias, tras la consejera Pradas, es un superviviente político. Emilio Argüeso empezó su carrera política en las juventudes socialistas, estuvo en Ciudadanos, de dónde le expulsaron, y se colocó cerca de Carlos Mazón, presidente de la Generalitat, que le nombró secretario de emergencias.

Años atrás, en 2019, al director de Emergencias murciano, Pablo Ruiz, le cesaron por ir al teatro la tarde de la DANA. También cesaron en el pasado al jefe de tráfico, Gregorio Serrano, que no interrumpió su fin de semana en medio de una histórica tormenta de nieve en febrero de 2018.

Ninguna ley exige una titulación para ser alto cargo. El currículum es una declaración responsable.

En La Rioja, Salva Díaz, exjugador de baloncesto, cuya biografía no menciona estudios y solo experiencia en deportes. Tras el cambio de Gobierno, fue nombrado director de Interior en Navarra.

El presidente de la Confederación del Júcar, Miguel Polo, es ingeniero de caminos y superó una difícil oposición. Aunque tres días antes de la DANA de Valencia dijo que inundaciones generalizadas como se vieron en el pasado no quiero decir que no vayan a ocurrir pero es difícil que se reproduzcan de esa forma porque las circunstancias de las cuencas eran muy distintas. Algunos le afean que fue concejal, aunque de Cultura y en su pueblo, de 500

habitantes.

Chequeamos la coordinación. En España hay 16 leyes en materia de protección civil y emergencias, explica José Luis Piñar, catedrático de derecho administrativo de la Universidad San Pablo CEU. Además, en las comunidades autónomas, la administración competente en esta materia varía, es decir, depende de distintas consejerías.. de justicia, administraciones públicas, interior o medio ambiente.  

Esto se traduce en distintas formas de ver las cosas, incluso en asuntos sencillos como los desfibriladores. Según cada comunidad autónoma se regula de forma distinta en cuanto a dónde se pone y quién lo puede usar.

El ejemplo máximo de descoordinación fue el incendio de Guadalajara hace casi 20 años. Teniendo ayuda a solo 10 kilómetros, en Soria, no se permitió que los bomberos de Castilla y León intervinieran. Solo se pidió ayuda fuera de la comunidad autónoma tras la muerte de 11 brigadistas. Después se creó la UME.

Ahora tras la DANA de Valencia, los bomberos han pedido una ley marco de coordinación. “Ha habido falta coordinación, de cooperación y de lealtad constitucional. En Alemania, un estado descentralizado como el nuestro la lealtad constitucional está en el ADN de las administraciones”, señala Piñar. Y eso aquí parece que cuesta entender.

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