No ayuda a la salud de muchos el persistente polvo en suspensión sahariano de los últimos días. La calima alcanza ya a la Comunidad Valenciana y el centro peninsular. Aunque donde sigue siendo más que visible es en el sur de Andalucía, como ha informado Beatriz Simó.

Las previsiones no descartan que se registren las llamadas 'lluvias de sangre', un barro rojo que tiñe incluso las pistas de Sierra Nevada, en Granada. Además, la calima afectará a buena parte del centro y mitad este de la Península así como a Baleares, pudiendo ser las precipitaciones en forma de barro.

Se trata de una borrasca que, desde su posición, trae vientos procedentes del sur que arrastran una masa de aire muy cálido, con aumento de temperaturas de entre cinco a diez grados por encima de lo normal.

Estas nubes van cargadas de polvo en suspensión que dan lugar, a un empeoramiento de la calidad del aire. Mala noticia para alérgicos y personas con síntomas respiratorios.

¿Cómo afecta a nuestra salud?

Este polvo afecta a nuestro aparato respiratorio dependiendo, sobre todo, de su composición y por otro lado del tamaño de las partículas. En el caso de las partículas mas grandes, afectan a la vía aérea superior, provocando sequedad en la garganta, tos, irritación, pero la experta recuerda que son las partículas mas pequeñas las que tienen más capacidad para llegar a nuestros pulmones y provocar síntomas respiratorios más importantes. Además, la calima transporta estas partículas más pequeñas.

Nuestro aparato respiratorio tiene un sistema de defensa que nos defiende de estas partículas. Por ello, los más afectados por esta calima serán los pacientes con enfermedades respiratorias crónicas, pero también los fumadores, niños, y personas en edad avanzada.

La calima puede llegar a provocar afecciones más graves. Estas partículas pueden provocar una crisis asmática en pacientes con asma, o un empeoramiento de los síntomas como la tos o dificultad para respirar. Además, si se mantiene en el tiempo, los pacientes respiratorios pueden tener más problemas e incluso mayor visitas a urgencias.

Por otro lado, un frente atlántico provocará nubosidad y precipitaciones en la mitad noroeste, más abundantes en Pirineos, Cantábrico y Galicia, donde podrían llegar a persistentes en su mitad occidental, y con probabilidad de afectar también a últimas horas al resto de regiones, y a su vez, hará que las temperaturas máximas aumenten en el tercio nordeste peninsular, litorales de Valencia y Canarias, aunque con descenso acusado en el resto.

Según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), un total de ocho comunidades autónomas y Melilla tendrán aviso amarillo de rachas de viento, oleaje, nieve y rissagas. En concreto, Andalucía, Asturias, Islas Baleares, Cantabria, Castilla y León, Galicia, País Vasco, Canarias y Melilla.

Este lunes destacan fenómenos significativos como las precipitaciones localmente persistentes en el oeste de Galicia y las acumulaciones significativas de nieve en la Cantábrica; la calima en Baleares y este peninsular; los intervalos de viento fuerte con rachas muy fuertes en Galicia, Pirineos, litorales de Alborán, Canarias, y con rolada de sur a oeste en el Cantábrico.

En cuanto a las precipitaciones y la nubosidad, serán generalizadas aunque no se prevén en el entorno de Alborán y extremos este y sureste peninsulares ni tampoco se espera que alcance a Baleares, con intervalos de nubes medias y altas. No se descarta que se pueda producir alguna tormenta o granizada ocasional en áreas de la mitad norte peninsular, y tras el paso del frente tenderá a poco nuboso en la mitad oeste.

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