Sangre, sudor y lágrimas, así podría definir Pablo Zabaleta lo que para él fue el partido de semifinales ante Argentina. El lateral derecho de la albiceleste celebró el pase a la final con una peluca azul y luciendo las heridas de la batalla.
El jugador del Manchester City sufrió un golpe en una acción con Kuyt, que le hizo ser atendido al sangrar el labio. No obstante, Zabaleta siguió jugando el partido hasta el final. Ya en el vestuario, declaró en un mensaje a través de su cuenta de twitter estar "orgulloso" de ser argentino.
El ex futbolista del Espanyol, pieza fundamental en el esquema de Sabella, podrá ser de la partida en la final del Mundial en Maracaná ante Alemania.