Eres el primer colombiano que compite en la categoría reina del Mundial de Motociclismo. ¿Cómo se viven las motos en tu país?
“En Colombia es muy diferente porque no hay la cultura motera que hay aquí en Europa. Ahora está creciendo la afición allí, porque estoy en el Campeonato del Mundo y la gente lo sigue más. Me enorgullece ser el único colombiano y latinoamericano aquí en el Mundial. Esto me da fuerzas y me motiva para seguir creciendo, seguir intentándolo”.
¿Y cómo se contrarresta esa falta de experiencia?
“Yo simplemente trabajo fuerte, entreno mucho y voy adquiriendo la experiencia que me falta. El piloto que soy ahora no es el mismo que era hace tres años. He ido aprendiendo de mis rivales, de las carreras, de los propios errores, trabajando con el equipo, con la telemetría, viendo vídeos… Al ser todo tan rápido, me ha venido mucha información de golpe, pero lo estamos llevando bien. En MotoGP somos 21 pilotos y somos los mejores del Mundo; me enorgullece poder pensarlo y decirlo, y siempre doy gracias a Dios por la oportunidad que me dio”.
Superado el ecuador del campeonato, ¿qué balance haces de la temporada 2016?
“Hemos tenido muy mala suerte. Es la temporada más difícil de las que llevo en el campeonato de MotoGP, porque en las carreras no me han salido las cosas como he querido. Estoy trabajando bien, estamos siendo competitivos en los entrenamientos, pero siempre que llega la carrera pasa algo y eso no nos deja estar donde debemos o queremos estar”.
Uno de los momentos importantes para ti desde que estás en MotoGP fue sin duda liderar la carrera de Assen. ¿Cómo viviste aquel momento? ¿Impresiona?
“Lo viví como algo normal. Aunque parezca raro, no piensas en nada. Estás concentrado pilotando. Lo que sentía es que tenía que seguir concentrado en lo que me marcaban en la pizarra, pilotando, manteniendo el ritmo. No salí del todo bien, pero empecé a pasar gente y cuando me puse primero, vi que tenía ritmo para seguir empujando y escaparme. Decidí mantener ese ritmo y, cuando empezó a llover otra vez, intenté bajarlo un poco pero no fue suficiente y sufrí una caída. Creo que podría haber hecho podio casi seguro”.
¿Cómo es Yonny Hernández cómo piloto?
“Soy un piloto muy agresivo, pero con el tiempo he aprendido a ir un poco más fino, más suave. También soy un piloto que asume riesgos, sólo cuando creo que tengo que hacerlo”.
¿Qué te aporta trabajar con un expiloto como Jorge Martínez Aspar, 4 veces Campeón del Mundo?
“Jorge es un apoyo muy importante para mí, porque en el box siempre me da muy buenos consejos, es una persona con mucha experiencia y todo un Campeón del Mundo. Siempre es bueno tener a alguien así en el box. De hecho, en este equipo he aprendido muchísimo y me han apoyado en algunos malos momentos que hemos vivido. Los han superado junto a mí y creo que es muy importante que no te den la espalda en situaciones difíciles. Es algo que yo valoro muchísimo. Por eso espero poder dar alguna alegría al equipo; esa es mi ilusión más grande”.
¿Cómo ves la lucha por el Mundial de MotoGP?
“He visto a Márquez muy maduro esta temporada, sobre todo a la hora de afrontar las carreras. No es como antes, que quería ganarlo todo. Ahora, si tiene que quedar segundo, queda segundo. Y sigue haciendo cosas como las de Alemania, donde ganó en una carrera muy complicada. Esta temporada, con el cambio de neumáticos, ha habido muchas caídas desde el principio y hemos tenido carreras muy movidas. Estamos en la mitad del campeonato y, aunque Márquez se ha distanciado un poco, el Mundial está abierto”.
¿Te ves algún día pilotando una moto oficial?
“Sí, es lo que siempre he soñado. Y espero que se cumpla. Por lo general, todas las cosas que me he propuesto las he logrado y este es un sueño que tengo a largo plazo, que espero que se me cumpla. Obviamente, el mayor de todos es ser Campeón del Mundo algún día”.
¿Qué le falta a Colombia para tener más pilotos de primer nivel? ¿Se está trabajando en eso?
“Allí los trazados son urbanos, sólo tenemos un circuito como tal en Bogotá y no es apto para un Campeonato del Mundo. Además, allí no hay base, el niño que corre es porque se ha comprado una moto, le gusta y quiere aprender. De hecho, yo soy el que da los cursos de velocidad cuando acabo la temporada, pero allí no se trabaja con la cantera como en España”.
¿Cómo entras, con 13 años, en el mundo del motociclismo de competición? ¿Por qué no empezaste antes?
“La realidad es que mi padre nunca ha corrido en moto. Eso es lo raro, que a nadie excepto a mi hermano le gustaban las motos. A mí me empezaron a gustar de pequeño, pero hasta los 13 o 14 años no empecé con el motocross. En Colombia no había los medios para hacerlo antes”.
De muy joven tuviste que dejar tu país y tu continente. ¿Qué fue lo más duro de tener que irte de casa? ¿Cómo viviste el cambio?
“Fue muy difícil, porque significó estar lejos de mi familia, pero era para hacer algo que me gusta y me llena muchísimo. El principio fue más duro, pero ahora tengo mi vida en Madrid, donde me he instalado desde hace casi ocho años. Tengo amigos, me siento bien en la ciudad y estoy como en casa. Ahora lo difícil es volver a ver a la familia, por mi calendario. Lo hago cada año cuando termino la temporada. Por suerte, somos una familia muy unida. Ahora mi madre me ha empezado a venir a ver en las carreras y esto me gusta mucho. Siempre me han apoyado para estar aquí y les estoy muy agradecido”.
Tu carrera deportiva ha sido un poco atípica: pasaste del motocross a la velocidad bastante rápido y en poco tiempo debutaste en Moto2.
“La verdad es que fue una evolución bastante rápida, porque me vine a España para competir en el Campeonato de Supermotard en 2008, siendo campeón de mi país, y también para correr en motocross. Y allí una persona vio que mi estilo era diferente. Con la supermotard iba buscando el suelo con la rodilla y en motocross siempre sacaba la pierna, así que me dijeron que podía ir bien en velocidad. Entonces probé en una carrera del campeonato de Madrid y gané con bastante diferencia. Más tarde me llegó una buena propuesta para participar en el Campeonato de España de Velocidad y ese año subí al podio en mi primera carrera, hice cuatro podios en siete pruebas y en las otras tres me caí cuando rodaba en una buena posición. Al acabar la temporada, me propusieron subir al Mundial en la categoría de Moto2 y luego ya fue todo rodado”.
¿Pensabas llegar en tan pocos años a MotoGP?
“La verdad es que todo ha pasado muy rápido. Quizás Dios me haya dado el talento para estar en MotoGP, pero la inexperiencia me pasa factura en ocasiones, como estoy viviendo este año. En carreras de flag to flag o en aspectos de puesta a punto estoy compitiendo contra pilotos como Valentino Rossi, nueve veces Campeón del Mundo, y otros que están pilotando motos de velocidad desde los cinco años, en circuitos buenos, en carreras competitivas… Mi familia a veces me pregunta cómo puedo estar aquí en esta competición si hace cuatro años estaba corriendo en las calles de Colombia”.