Espargaró partió desde la 'pole' en el circuito Marco Simoncelli, realizó una gran salida y se mantuvo al frente las tres primeras vueltas, pero entonces apareció el japonés Nakagami. El piloto nipón adelantó al español y se puso a tirar, vuelta a vuelta fue aumentando la diferencia del japonés, que llegó a despegarse más de dos segundos.
Nakagami dio un recital durante 16 vueltas, seguramente empujado por las ganas de lograr su primera victoria en el circuito en el que falleció en 2010 su compatriota y amigo Shoya Tomizawa. El japonés quería dedicarle la victoria a Shoya, pero no pudo ser, porque a falta de siete vueltas Pol comenzó a apretar, recortó tiempo y acabó pasando a Nakagami a falta de dos. El japonés quedó segundo por cuarta carrera consecutiva, pero el homenaje, bandera japonesa en mano, en la curva en la que falleció Tomizawa no faltó.
Emotivo también fue ver a Aleix Espargaró llorar en el muro de las escuderías con la victoria de su hermano. No podía ser de otra manera, Pol logró vencer tras realizar su mejor carrera del año; esto, unido al sexto puesto de Redding, que tuvo una carrera complicada a pesar de una gran salida, deja al catalán a tan solo 23 puntos del liderato del Mundial.
El podio lo completó Esteve 'Tito' Rabat (Kalex), que se mantuvo toda la carrera en tercera posición y como viene siendo habitual en él, cuidó muy bien de sus neumáticos, lo que le permitió rodar las últimas vueltas con cierta holgura y sin sufrir por su tercer puesto.
Así pues, tras la gran carrera que se vio en San Marino llegará Aragón, donde Espargaró logró la victoria la temporada pasada, con el Campeonato del Mundo más apretado que nunca a falta de cinco Grandes Premios.