Cuando Pablo salió de ‘Operación Triunfo’ montó un bar con su hermano, algo que él mismo ha denominado como “la juerga más cara de mi vida”. La cosa no salió bien, tocaron fondo, debían dinero y sabían que allí no estaba su futuro. Por todo ello, Pablo le escribió a un amigo que sabía apreciar el amor que siente por la música y que a día de hoy es su representante, Armand Martín, y que fue el que le ayudó a levantarse y a llegar a componer para artistas y también amigos de la talla de Bustamante, Malú…