Paz Padilla relata cómo el médico le dijo que su marido tenía un tumor cerebral: “Fue como un hachazo que me metieron aquí en el pecho”
Paz Padilla, en 'Mi casa es la tuya': “La muerte de mi madre, me ayudó a entender la de Antonio”
El marido de Paz Padilla falleció a los 53 años de edad
Paz Padilla ha explicado a Bertín Osborne en ‘Mi casa es la tuya’ que siempre “estoy arriba”, disfruta cada momento e intenta vivir cada instante al máximo hasta que la vida le dio una bofetada, “cuando Antonio enferma, qué día, lo recuerdo”, ha contado.
El pasado julio de 2020 la presentadora perdió a su marido tras detectarle un tumor cerebral, pero justo unos meses antes también falleció una persona muy importante. “La muerte de mi madre, me ayudó a entender la de Antonio”, ha declarado, “comprendí las fases de la muerte con ella”. “No paré de llorar durante cuatro días con mi madre”, ha contado, desde que llegó, no pudo contener las lágrimas hasta que se fue.
Paz Padilla se dio cuenta que algo ocurría con su marido, el día que Antonio se salió en marcha de su coche. Siempre fue muy prudente al volante pero ese día algo le pasaba, ella le hizo señales, de que parara, iba muy rápido, pero Antonio no le hizo caso. Muy asustada, se lo llevó corriendo al hospital, allí le hicieron un tac, y le dieron la peor noticia de su vida.
“El médico me metió en el despacho, su marido tiene un tumor cerebral no sé si primario o secundario pero lo más probable es que le quede muy poco tiempo de vida. Te dejo aquí para que llores o grites pero cuando salgas de aquí te pido que no lo hagas delante de él. Fue como una herida que cuando te quitan el hacha empiezas a sangrarte y ahí empecé a llorar, a llorar y no dejé de llorar”, ha relatado Paz Padilla muy emocionada recordando este momento.
Cómo se preparó para la muerte de Antonio
Cuando ya estaba con él y el tratamiento le empezó a hacer efecto, Antonio volvió a reconocerla, “gorda”, “y él me decía, "yo estoy bien, y me tranquilizaba él a mí”, ha recordado. En ese momento fue cuando entendió que nunca más Antonio le iba a notar nada. Y esa noche no paró de llorar, “me tocaba la cara estaba mojada como un grifo cuando está roto”. Ahí entendió que su marido iba a morir, que era cuestión de tiempo, “a partir de ahí empecé a averiguar sobre la muerte, empecé a prepararme para ayudarle a morir y ayudarme en el duelo”, ha explicado. Empezó a leer, a buscar información sobre qué hay después de la muerte, qué es la muerte…