Pastora se he emocionado mucho al hablar con Bertín sobre aquel día en el que se desmayó en un escenario de Sevilla. La cantante ha explicado que, para no defraudar a su público después de Eurovisión, se volvió mucho más exigente de lo que ya era. “No quería ni reírme para que no se me cansara la voz. Ahí empecé a dejar de lado a Pili, a mi yo como persona”, ha confesado.