Boris Izaguirre recibía a su padre en su casa de Madrid y junto a Bertín Osborne. Rodolfo habló abiertamente de su hijo y de cómo vivieron su infancia en Venezuela. “Una profesora me comentó que llevase a Boris a un psiquiatra y yo, tonto, lo llevé. Y todo porque no quería jugar con la pelota. Sufrió mucho, lo abucheaban en público”, explica.