Una de las anécdotas sin duda más impresionantes que ha contado el periodista en su entrevista con Bertín ha sido sin duda el día en el que la madre de una etarra se puso frente a él y le pidió perdón llorando: "Mi hija y su novio intentaron matarle, pero en su lugar encontraron a un par de guardias civiles". Lo que sin duda más mortificaba al periodista no era su seguridad, sino la de su familia: "Sin embargo, mi mujer me dijo que si yo decidía que nos quedábamos, nos quedábamos".