El ‘trata de arrancarlo’ ha perseguido y perseguirá a Carlos Sainz durante toda su vida. Su padre tiene claro que no fue tan malo lo que le sucedió: “Le dije que no se preocupara, que así hablarían más de él que si volvía a ganar”. Y estaba en lo cierto. Lo malo, para Carlos, es que en España se le colgó el sambenito de la mala suerte, afortunadamente de forma internacional sucedió todo lo contrario, por eso, cuenta que cada vez que le hablan de ello contesta igual: “Cuando dicen que tengo mala suerte siempre digo que espero que mis hijos tenga la misma mala suerte que yo”.