Será por la amistad, por la magia, por la familia, por el flamenco o por la comida típicamente gitana. O por todo. Pero lo cierto es que el ambiente que se ha creado durante la entrevista a Antonio Carmona ha conseguido traspasar la pantalla. Y el corazón de Bertín Osborne. El presentador ha llorado como un niño al escuchar a la Niña Pastori cantando ‘Cai’… demostrando que así es el flamenco: pura emoción.